CAPÍTULO 38.- segundo fragmento

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—Estaba en medio de un edificio abandonado en Corea y creo que he encontrado un cuartel de drogas por casualidad —Estefan pateó la puerta de su tío Oliver y entrando dramáticamente—, así que espero que esta reunión de escuadrones tenga una buena razón, porque necesito ir a ver si ese cuartel de drogas tiene que ver con mi investigación o solo los desgraciados han tenido muy mala suerte de que los encontrara.


—Creo que empezaré a redactar mi carta de renuncia al escuadrón —habló Jeremy que llegó segundos antes que Estefan.


—Eres un lobo blanco, se supone que debes ayudar a guiar a los hombres lobos —empezó Matt.


—Sanarlos es una mejor opción para mí — protestó Jeremy.


Alan ingresó con cara de pocos amigos.


—Estaba sobrevolando la barrera de la isla para ayudar a mantenerla —gruño Alan—, tengo que terminar antes que anochezca ¿Qué carajos está pasando ahora?


—Bueno, ahora si estamos casi completos —hablo Alex.


—Falta Liam —dijo Bael que estaba parado en una pared observando todo en silencio—, ¿Dónde está?


—Fue Liam quien nos convocó —Oliver alzó su mirada de su trabajo—, ya debe llegar.


Bael alzó una ceja, miró a Theo en busca de una explicación y este solo se encogió de hombros. Era temprano y Bael se había tomado unos días de descanso después del cumpleaños de Liana. Pronto sería la reunión de manadas y Bael quería estar tranquilo para afrontarla. Además, que estaba visitando a sus amigos con los que no hablaba hace mucho tiempo.


No había visto a Liam desde la madrugada donde lo ayudó a ir a su casa junto a Theo.


La puerta se abrió, todos pensaron que era Liam, pero era Gabriela con una gran sonrisa en el rostro.


—Mi princesa ¿Qué haces aquí? —Alan la miró confundido y después miro a Oliver con sospecha—, ¿No le diste licencia de maternidad?


—Se la di —Oliver miro confundido a su sobrina—, se la di a ti y a Jose, ¿Qué haces aquí cariño?


—Vengo a apoyar a mi príncipe —Gabriela se sentó al lado de su tío Alex, el cual le apretó la mano con cariño—, Liam tiene cosas importantes que discutir y me pidió que venga, Jose iba a acompañarnos también, pero Zephyra se quedó dormida en su regazo y si la movemos solo un poco, se despertara a gritos incesantes.


Gabriela miró a Estefan, este le alzó una ceja y esta le guiñó el ojo. Bael temblaba de rabia, pero su gemela ni siquiera lo miró.


Liam ingresó un poco después, luciendo un poco desencajado. La habitación se llenó de un incómodo silencio por la actitud sombría del príncipe heredero. Junto a él, como siempre le seguía Seraniel. El ángel se pegó a una pared y quedó en silencio para no intervenir. Normalmente se quedaba en otro lugar del palacio al sentir a Liam dentro de él. No obstante, sentía al príncipe agitado, así que estaba a su lado donde fuera ese día.

THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUNWhere stories live. Discover now