problemas

215 6 0
                                    

-¡Por fin! – grité cuando vi a parecer a los tontos por la puerta.

-Cállate, ha sido su culpa – Ángela sonrió como una niña pequeña, pidiendo esas disculpas mientras se balanceaba sobre ella misma -. ¿Ves Ángela? ¿Ves? Ya ha empezado la fiesta, y sin nosotros.

-Joder Zayn, ya. Lo siento por si me quiero poner guapa.

-Tú siempre estás guapa – pasó Louis por su lado y se la llevó.

Zayn y yo nos miramos. Y faltó tiempo para que riésemos.

-¿Y nuestra amiguita? Digo, tu amor – rió.

-Se ha ido – suspiré.

-¿Y eso?

-No quería una fiesta con nuestra gente – reí.

-A cambiado.

-Todos hemos cambiado – me dirigí al sofá y me apoyé en su respaldo.

-Bueno, esa ya no importa. ¿No? Venga, ¿qué quieres tomar? – golpeó en el hombro.

-Lo que sea – le miré y rió.

Qué guapa iba. Y qué guapa ha sido siempre. Solo que ahora más. Esa niña ha crecido y no saben como está. Ese cuerpo menudito está ahora más, más… La virgen.

Zayn se fue a la súper barra y quedé pensativo. No sé ni en qué pensaba. Pero notaba como la música se oía más fuerte y cómo la gente iba perdiendo sus papeles. Venga ya, no pierden el tiempo. La fiesta empezó hace diez minutos y la mayoría está borracha.

-Anda, puedes irte con ella – se puso Louis a mi lado.

-¿Cómo?

-Que sé que estás deseando irte con ella. Ve.

-¿Voy? – sonreí.

-Sí – rió -. Pero tráemela sana y salva – me golpeó.

Corrí al perchero, a coger mi abrigo. Rápidamente di el portazo, y me encamine a no sé donde. Pero sabía donde encontrarla, no tenía por qué darme prisa. 

Ah, ya sé en lo que pensaba. Si ____ conociera a la gente que hay en la fiesta, le gustaría. La única chusma que tenemos junto a nosotros es James y su pandilla. Los demás son como nosotros. Pero claro, ella a nosotros nos considera chusma. ¿No?

Entré al hospital y me dirigí al ascensor. Dentro de él había un anciano en silla de ruedas y una mujer acompañada de un gotero, con un pañuelo en la cabeza. Iban a varias plantas más, pero yo me quedé en la tercera. Donde están todos esos niños a los que ____ ayuda. Esos que tienen algún problema, esos que no tienen pelo o que están al borde de la muerte. Pero se ve que ya no los ayuda tanto.

-¿Harry? – miré a la enfermera, extrañado. 

-¿Hola? – dije confundido.

-Soy Claire. ¿Me recuerdas? – sonrió.

Por un momento negué con la cabeza, intentando buscar en mi cerebro quien era esa persona. O simpremente si la conocía. Era una enfermera joven y rubia. Con unos bonitos ojos marrones y rechoncha. Debido a su estatura, ya que era muy baja y además tenía que bajar mi cabeza para mirarla a los ojos.

-¡Ah claro! – mi cerebró reaccionó -. Eres la amiga de ____, ¿no?

-Sí – rió -. Pensaba que ya nos habíais olvidado. ¿Y ____? – preguntó mirando detrás de mí.

-Eso es lo que vengo a preguntar – reí.

-¿Cómo? – frunció su ceño.

-Que si ____ está aquí.

soldado del amorTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang