El legado de Thor ➸ COMPLETA (y editando primera parte)

Capítulo 7

- Thor -

- ¿Por qué nunca me dijiste que tenía una hija? – pregunto, una vez que estamos lo bastante lejos de todos. Ella se para al momento – Entiendo que antes de volver después de tres años es normal no pudieses o quisieses decírmelo, pero, ¿cuándo la conocí? Es decir, es mi hija, merezco saber si tengo hijos.

Ella se gira, haciendo que quedásemos el uno en frete del otro, sigo esperando una reacción por su parte. No me mira directamente a los ojos, solo mira el Mjolnir con cierto odio.

- Jane, di algo, por favor.

- Entiendo que no lo hice muy bien – empieza a decir - Pero entiéndeme, te habías ido, no sabía si volverías. La última vez tardaste dos años y esta vez fueron tres... No quería que lo supieras porque estaba segura que te la llevarías a Asgard y... No estaba preparada para separarme de ella, es toda mi vida...

- ¿Ni si quiera cuando descubriste que ella tiene un crecimiento especial? ¡Su salud estaba en juego!

- ¡Nadie sabía que era, ni tan si quiera tú, así que no me vengas dando clases de moralidad! Sí, hice mal al no decirte nada cuando tuve oportunidad, pero tú también lo has hecho mal al desaparecer tanto tiempo. Tres años Thor, tres años sin saber nada de ti. Ya ni si quiera pedía que volvieses para verme, que aparecieses para ver a tus amigos, pero nada. Tres años...

- ¡No pude! ¡Heimdall dejo de verte, no podía saber si querías verme! No sabía nada y también estaba todo el asunto de las gemas del Infinito, sumándole a Loki...

- Suenan a excusas.

- ¿Crees que te dejaría sola por propia decisión?

- Es lo que has hecho.

Ambos nos quedamos en silencio, manteniéndonos la mirada fijamente. Dudo que uno de los dos vayamos a ceder. Oímos las puertas abrirse con brusquedad y giramos nuestras caras al mismo tiempo. Entran al reciento Natasha y Clint, bastante alterados y corriendo.

- ¿Thor? – dice Barton cuando me ve.

- ¿Dónde está? – pregunta Romanoff, después de asentir al verme, refiriéndose al Capitán.

- En la sala de curación – contesto. Los agentes y yo nos dirigimos a ella, pero Jane se va en la dirección contraria.

Llegamos al cuarto y la gente de batas blancas ya no está a la vista. Rogers sigue tumbado en la camilla, mientras Banner mira los aparatos que están alrededor de él. Elisa y Stark están sentados, un poco alejados de esos dos.

- Está estable – informa Tony, al oírnos llegar. Está agarrando la mano de mi hija a la vez que ella está apoyada en su hombro sin mirar a nada en concreto – Todavía no sabemos si despertará.

- Llevaba casi dos semanas desaparecido – dice Nat, acercándose a él – Se fue justo después de que volvieseis a Asgard, supongo que su cabeza no soportó tanto estrés y agobio y su cuerpo reaccionó de esa manera.

- Gracias que su corazón ha vuelto a latir – dice Bruce – Su suero está haciendo que se recupere con mucha más rapidez y eficacia – él se acerca a ella y la susurra algo al oído y acaricia su mano con amor. Sonrío al escuchar lo que la dice pero los demás no llegan a oírlo.

- ¿Cuánto tiempo vais a estar aquí? – pregunta Stark, rompiendo el silencio que se había formado.

- No lo sé – contesto – Hemos venido porque Heimdall nos avisó, nada más.

- Regresaremos pronto – dice Elisa – Todavía tengo mucho que aprender allí.

- ¿Ahora quieres ser una soldado asgardiana? – pregunta el arquero.