42. V for Vendetta

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Y ahí estaba. Una imagen que nunca pensé ver: Anne de Bourgh y lo que parecía su guardaespaldas justo frente a mi casa. Ella le murmuro al a él y el se alejo un poco antes de que ella dirigiera a mi.

— Debes sospechar el motivo de mi visita —me dijo ella pero yo negué con la cabeza aún confusa por esta situación. No me gustaba el tono de voz en que hablaba

— Te equivocas, no sé que a se debe —respondí — ¿Cómo sabes donde vivo? ¿Acaso Collin te lo dijo?

Si era así tenía que hablar seriamente con él, es decir, tenía que acusarlo con Charlie. Collin no podía hacer esto, esto era un abuso a mi privacidad.

Ella sonrió de forma burlona mientras sus ojos verdes fríos me analizaban con aire de superioridad.

— Entonces no sé por qué la gente dice que eres tan lista o por qué presumes de serlo. —fruncí el ceño ante esto pero antes de que pudiera responderle lo que se merecía ella continuó — Vengo a pedirte que dejes a mi prometido y a mí en paz.

Definitivamente no me esperaba eso. Fue como un golpe en todo el estomago ¿Ella había venido hasta aquí a decirme que dejara a su prometido en paz? Sabía que ellos estaban comprometidos, aunque guardara eso en un rincón oscuro de mi mente, yo lo sabia. Tal vez, solo tal vez esperaba que después de todo lo que había sucedido su compromiso hubiese terminado hace tiempo. Aunque ellos aún estuvieran comprometidos ¿por qué Anne De Bourgh estaba aquí?

— Lo siento, no te entiendo —dije finalmente. Ella rió sarcásticamente.

— ¿Juegas a hacerte la inocente? Tal vez eso funcione con Will y con los demás pero conmigo no. Yo sé cómo son los de tu clase.

¿Quién se creía esta chica que era?

— ¿Disculpa? ¿los de mi clase? Yo no juego a hacerme la inocente —replique —Solo no entiendo qué tengo que ver yo en los asuntos entre tú y Will.

Hace unos momentos estaba dispuesta a ir a buscarlo pero eso no significaba que me metería en una relación. Quiero decir, si Will seguía comprometido con Anne obviamente no saldría con el. Nunca ha sucedido nada entre Will y yo.

— No te hagas la tonta Elizabeth Bennet sabes bien de lo que hablo. Te has dedicado a metértele por los ojos a Will pero yo sé que Will nunca se fijaría en un chica como tú.

Tuve que aguantar las ganas de darle una bofetada, yo no me le estaba metiendo por los ojos a nadie.

— ¿Y cómo es una chica como yo? —dije subiendo mi tono de voz — Si estás tan segura de eso último entonces no veo por qué te tomaste la molestia de venir a Hertford.

La sonrisa de Anne desapareció.

— Chicas pueblerinas como tú que solo se quieren aprovechar de su dinero tratando de seducirlo con trucos baratos.

Solté una carcajada sarcástica al escuchar eso último.

— Si crees que Will se puede dejar "seducir" por trucos baratos entonces ni siquiera lo conoces —le dije y eso evidentemente le molestó.

— No eres nadie para decir que no conozco a mi prometido, hemos estados destinados a estar juntos desde que teníamos 7 años. Soy todo lo que él siempre ha deseado —dijo ella aunque podía ver la inseguridad en sus ojos. Nunca pensé que una chica como ella podía sentirse así, insegura.

Cada vez que ella lo llamaba su prometido sentía una punzada en el corazón.

— Si estás tan segura de tu compromiso sigo sin entender qué haces en mi casa —dije intentando que mi voz no temblara.

Las Chicas Bennet {Editando}Onde as histórias ganham vida. Descobre agora