Mi vida empieza y acaba contigo

LXXV

Alaric

Regresamos al medio día, Luca y yo traíamos lentes negros puestos, un tanto distraídos, adoloridos y  demasiado serios.

-Está buena la cruda, ¿no? - Amy nos dijo.

-Un poco, jajaja - Luca le contestó y ellas nos miraron.

-¡Hey! Cabrón, es sarcasmo - le golpeé el hombro.

Luca se separó de nosotros y me quede solo con Liv, nos sentamos en el sillón. Aún seguíamos en casa de Amy.

Me recosté y dejé caer mi cabeza sobre las piernas de Liv, ella me miró tiernamente y acarició mi cabello.

-¿No me dirás nada? - Pregunté al quitarme los lentes.

-No - dijo secamente - prefiero que sea la última vez que te veo de esta forma.

-Sí, lo juro, jajaja - acerqué mi mano a mi cabeza y la froté en mi frente.

-Bueno, hay que irnos porque más tarde habíamos quedado con Hugo que iríamos con él, ¿recuerdas?

Nos levantamos del sillón, Liv se despidió de Amy y Luca mientras yo ponía mi mochila y su bolso en el auto. Llegando a casa fui directamente a la habitación, entré al baño y me di una ducha de agua fría para refrescar mis sentidos, tomé una pequeña siesta para tratar de estar más despierto e ir con Liv.

-¿Mucho mejor? - Liv me preguntó.

-Sí, ya. - Dije con una risa un poco silenciosa.

-Vale, entonces vayámonos.

Liv condujo todo el tiempo, hasta la casa de Hugo. Nos recibió como siempre. Quiso que comiéramos con ellos y así lo hicimos, pero el punto de la visita era que Hugo iba a darle la cafetería a Liv y quizá le dejaría el cargo de sus demás cafeterías que tenía en otros lugares.

-¿Pero estás seguro de ésto? - Liv se había sorprendido tanto como yo.

-Sí, ¿o que no te sientes capaz de controlar todo ésto? - Hugo arqueó una ceja.

-Sí, claro que lo puedo hacer.

-Entonces no tengas miedo, yo sé que podrás administrarlo de la mejor manera.

-Sí... Bueno, eso espero.

-¿Cuándo termina su periodo en la universidad?

-No lo sé,  pero no falta mucho, ¿por qué?

-Para que durante ese tiempo podamos ir a ver las demás cafeterías y también para que hagan la boda.

-Sí, sobre eso... Agus me ha dicho que tiene un lugar perfecto cerca de un bosque, es una cabaña y dice que parece mansión - comenté.

-Más que perfecto, ¿no creen? - Hugo hizo señas a Lluvia para que fuera hasta él.

Lluvia se sentó junto a Hugo, él la abrazo alrededor de la cintura.

-¿Es lo creo que es?  - Lluvia miró a Liv.

-¿Qué? ¿De qué hablas?- Liv le preguntó.

-Jajaja, no juegues. Estás... Estás... ¿Estás embarazada?  - Lluvia se cubrió la boca con las manos.

Liv asintió con la cabeza, Lluvia había hecho que se ruborizara muchísimo.

-Jajaja, ¿y aún no saben que será?

-No, pero en la semana iremos con el doctor para que la revise y quizá le hagan un ultrasonido - contesté por Liv.

Antes de que empezará a anochecer Liv y yo regresamos a casa, nos cambiamos y nos pusimos más cómodos. Puse una película en nuestro cuarto, me acosté junto a ella,  la abracé y la besé tiernamente.