Expelliarmus

9.2K 791 171
                                    

Al llegar al castillo alumnos y profesores tomaron sus respectivos asientos, los murmullos se escuchaban en todos los rincones, el ataque de los dementores parecía ser el único tema de conversación. Cuando Albus Dumbledore se acercó al atril en el cuál una lechuza respondió abriendo sus alas, un silencio rotundo se hizo en el gran comedor.

- ¡Bienvenidos nuevamente! – Saludó Dumbledore – Deseo hayan pasado unas excelentes fiestas con sus familias, sé que son tiempos difíciles. Quisiera disculparme por el incidente con los dementores hoy, el ministerio ha sido notificado. También debemos agradecer a la señorita Lamperouge y al señor Black por proteger a sus compañeros con unos encantamientos patronus perfectamente conjurados – Todos los alumnos, excepto los de Slytherin se unieron al aplauso de Dumbledore quien contemplaba a Isadora y Sirius con una ancha sonrisa. – De ahora en más les suplico absoluta cautela – Su semblante se ensombreció. Dichas sus últimas palabras la comida apareció mágicamente en las bandejas de las cinco mesas del comedor.

Luego de la cena los alumnos se encaminaron a sus respectivas salas y habitaciones.

- ¡Mañana comienzan las clases de duelo! – exclamó James entusiasmado. – Espero que me toque contra Quejicus y...

- Ya deja de ser así de infantil, James – pidió Lily rodando los ojos.

- De seguro te hace polvo – Dijo Isadora para molestarlo – debe saber un millón de maleficios. – James emitió un bufido de incredulidad.

- Olvídalo Cornamenta, no te tocará con él ni en sueños, menos si McGonagall está presente – comentó Sirius mientras frenaba a Isadora con una seña para advertirle del escalón trampa.

Al llegar a la sala común se desplomaron en los sillones junto al fuego, charlando sobre los posibles oponentes que tendrían en la clase de duelo.

- Sólo espero no tener que enfrentarme con ustedes – rogó Alice – No sería agradable. – Isadora y Lily asintieron.

- ¿Nerviosas? – Se burló James con gesto engreído.

- ¿Lo dices por ti?, Oh, no claro que no – Lily soltó una risita y James se cruzó de brazos falsamente ofendido.

Cuatro niños que parecían de segundo año se acercaron al grupo y se detuvieron observando a Sky como si no se animaran a hablarle. Los mayores se observaron entre ellos. El pequeño que iba adelante se animó a hablar.

- H..hola – Saludó - ¿Podemos ver el caballo? – Dijo torpemente atropellando las palabras. – Sky miró a sus amigos quienes sonreían enternecidos y asintió dibujando una tímida sonrisa. Tomó su varita de entre los pliegues de la túnica y trazó un espiral en el aire hasta que un caballo comenzó a galopar alrededor del sillón dejando una cálida estela en su camino.

- ¡Fabuloso! – exclamó la niña más bajita de los cuatro. - ¿Puedo hacerlo?

- Claro que sí – respondió la aludida mientras el caballo de luz se desvanecía – Pero debes practicar, piensa en un recuerdo, el más feliz que tengas y di <<Expecto Patronum>>

- Pero tú no lo has dicho – Dijo otro de los niños. Ella lo miró confundida.

- Oh... es que... lo olvidé, pero deben decirlo – Concluyó. Luego de agradecerle, los niños se despidieron y se perdieron rumbo a sus habitaciones.

- ¡Vaya ahora eres famosa! - Dijo Remus queriendo molestarla.

- Ay, cállate – opinó ella.

Sirius Black: el velo de la muerte¹Where stories live. Discover now