La apuesta

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Recomendación para escuchar mientras lees este capítulo: "Cupidos drogados"- Babasónicos

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Recomendación para escuchar mientras lees este capítulo: "Cupidos drogados"- Babasónicos.

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LA APUESTA

Julieta tomaba un café cargado y redactaba un artículo para entregar a la catedra de la facultad que menos le gustaba.

Bostezaba, revisaba sus apuntes, refregaba sus ojos, volvía a bostezar, miraba si su celular tenía nuevos mensajes...nada.

¿Nadie iba a distraerla de su tedioso trabajo?, suspiró y apoyó la cabeza en el teclado buscando un poco de inspiración o algo mejor, tal vez una siesta.

Alguien abrió la puerta de la sala de estudio y al notar que era su amiga Rebecca sintió un poco de alivio, la joven llevaba planos y su laptop, seguramente también venía a estudiar.

- ¿Qué hay de nuevo?

Preguntó Julieta tratando de entablar una conversación para olvidar su aburrida tarea, Rebecca sonrió y se sentó junto a ella para poder charlar un buen rato mientras desenrollaba sus planos.

-No mucho, ¿Quieres ir al bar de siempre a comer unas pizzas mañana?, estoy necesitando desestresarme un poco.

Murmuró su amiga y Julieta asintió agradecida de que ella le leyera la mente, estaba feliz de visitar ese pequeño, bohemio y acogedor sitio cerca de su residencia donde frecuentemente se juntaba con sus amigos a beber cervezas artesanales y degustar las delicias que servían allí.

-Claro, le aviso a Jess, Juliana y quizás Peter quiera sumarse a nosotras.

-Genial, ¿Qué tal el músico no desconocido?

-Bien, en su casa supongo.

Se encogió de hombros y miró su celular, no habían novedades acerca de Sebastian pero eso no la preocupaba, siempre se reportaba cerca de las diez de la noche.

- ¿Cuándo vamos a salir los cuatro?

Julieta casi escupió su café y luego miró a su amiga, ¿realmente le estaba pidiendo que tuvieran una cita de cuatro?, ¿Rebecca, su novio, Sebastian y ella?

Se imaginó esa extraña situación y sus tripas se retorcieron. Rebecca era una chica enamoradiza, amante de las escenas amorosas y creadora de situaciones embarazosas.

¿Qué haría en caso de tener dicha cita doble?, ¿Qué sucedería cuando Rebecca quien era una obsesiva con las selfies tomara su celular para hacer una?, ¿la publicaría?, ¿Cómo reaccionaría ante ello?

La ansiedad social la carcomía pensando en que no era una buena idea, apenas si llevaban dos meses conociéndose como para hacer una foto pública.

Está claro que Julieta no opinaba negativamente acerca de aquellas personas que si se apuraban para tener una relación formal pero no era su estilo.

El Maestro del SonidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora