Julieta es una joven estudiante de abogacía con persistentes sueños de cambiar el mundo.
Astuta, ansiosa, filantrópica, feminista, gran devoradora de libros y con creencias filosóficas sumamente definidas la chica construía su propi...
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DOLOR
Julieta despertó agitada esa calurosa madrugada de verano, había pasado solo un día desde el primero de enero y a pesar de estar en una pequeña casita cerca de la playa la joven solo deseaba regresar a Pueblo Manzana.
Era casi una tradición familiar pasar año nuevo en un balneario de verano llamado "Atlántida" a pesar de lo incomodo que era acomodarse en un inmueble poco espacioso para cinco personas.
Por otra parte, Sebastian vacacionaba junto a sus amigos en la costa, pero bastante lejos de los brazos de Julieta a pesar de que se mantenían en contacto vía WhatsApp como ya estaban acostumbrados.
-Mamá, por favor, quiero irme a casa. Hace mil años que no veo a Marcia y en verdad siento que ahora deben comenzar mis vacaciones, acuérdate de que el diez de enero ya volveré a la capital para estudiar, tengo examen en febrero.
-De acuerdo, iré un par de días después así que espero no tener la casa hecha un lio.
Bromeó la mujer y esa misma tarde su hija retornaba a su hogar de la infancia, allí mismo le esperaba una pequeña comitiva de recibimiento.
-La única persona del mundo que en pleno verano se mantiene de un blanco impoluto.
Dijo Marcia jocosamente mientras ayudaba al taxista a bajar la maleta de su amiga.
-Por fin llego, te juro que no aguantaba un día más sin venir a Pueblo Manzana.
Murmuró Julieta abrazando a su amiga y después de una breve bienvenida comenzaron los festejos por tener una casa entera para el descontrol los cuales duraron un par de días hasta que la madre de la joven regresó.
Lo bueno de volver a Pueblo Manzana era estar al día con sus amigos y poder salir por las noches a vagar por las calles de la ciudad algo más disfrutable que estar tirada en una esterilla sobre la arena y bajo el sol.
*Me regreso mañana a la capital. Voy a componer y tocar para un evento. *
La joven meditó esa noche si era buena idea volver un par de días antes de lo previsto para volver a ver al musico y teniendo en cuenta que si no regresaba quizás tardaría mucho más en reencontrase con Sebastian así que esperó un día más y la mañana del seis de enero se encaminó de nuevo a la capital.
Al llegar a su nuevo hogar Jessica la recibió con misticismo notando que regresaba antes de la fecha indicada pero no dijo nada porque la televisión ya le había informado que la orquesta donde trabajaba Sebastian tocaba ese día en un prestigioso evento.
- ¿Sales esta noche?
Preguntó unas horas después al ver como Julieta se arreglaba frente al espejo y la joven sonriendo asintió con la cabeza.
