Un comentario incómodo

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UN COMENTARIO INCÓMODO

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UN COMENTARIO INCÓMODO

Julieta no estaba deprimida en absoluto, ahora mismo se sentía motivada, tenía algo por lo que luchar y pensaba que si daba todo de si misma por una justa causa ganaría de todas formas.

Esas semanas de chats con Sebastian a veces se volvían deprimentes como también otros días eran esperanzadores, siempre existía un tema para conversar, tarde o temprano contestaba y la joven albergaba la esperanza de que cuando volvieran a verse las caras esa chispa inicial que tuvieron el año pasado volviera a renacer.

Estos últimos veranos fueron demasiado largos para Julieta, eternos podría decirse.

En uno de ellos falleció su padre y ya nunca volvería a ver a su mejor amigo, en el otro había conocido a una persona especial de la cual no quería distanciarse demasiado, el aprendizaje físico, emocional y mental que tenía con Sebastian era realmente maravilloso.

Sumida en pensamientos empacó sus cosas para retornar a la capital, un nuevo año, nuevos desafíos académicos como también emocionales, la joven sería ayudante de catedra en la facultad de Derecho.

El Derecho Constitucional podría sonar tedioso y aburrido, pero para Julieta era emocionante seguir aprendiendo sobre algo que le apasionaba.

Mientras viajaba en el bus pensó en todas las aventuras que tendría este nuevo año. Nuevas materias, nuevos compañeros, muchas salidas con Sebastian.

Febrero estaba terminando, el verano había sido tan largo que estaba feliz de volver a la rutina. A las clases, las salidas con amigos, las visitas a Sebastian...

Su nuevo hogar se encontraba silencioso y tranquilo, habían pocas chicas en la casa, esto significaba que Jessica estaba en el trabajo.

Desempacó sus cosas y tendió la cama, guardó sus objetos personales deteniéndose en aquella corbata de moño que guardaba tan celosamente y sonrió, hace mucho tiempo que no la veía, pero fue a parar de nuevo a su armario entre cartas, fotos y ahora también entradas de conciertos, principalmente aquellos donde Sebastian había participado.

Se sentía bien consigo misma, esa esperanza por reconquistar a Sebastian era mayor ahora que ambos se encontraban en la misma ciudad, además de eso la semana entrante sería el primer concierto de la orquesta y ya tenía una buena acompañante, su amiga Rebecca.

Rebecca deseaba conocer a Sebastian, verle de cerca, ir a un concierto, conversar un poco con aquel hombre que maravillaba tanto a su mejor amiga.

Porque Julieta hablaba mucho de Sebastian, no existía una persona entre su círculo íntimo que no supiera algo sobre él, a la joven le encantaba hablar de lo apasionado que era por su trabajo, informar sobre algunas citas o conversaciones interesantes que habían tenido o simplemente decir lo afortunada que era por salir con el hombre más lindo y sexy que conocía, aunque Jessica opinara todo lo contrario.

El Maestro del SonidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora