27. Un beso a cambio de un adiós

3K 237 116
                                    

Cuando acabo de tocar la canción, Cam se acerca a mí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando acabo de tocar la canción, Cam se acerca a mí. Toma mi mano y entrelaza nuestros dedos, así como en los viejos tiempos. Extrañaba tanto la sensación de su suave piel que me hace alusión su preciada cercanía. 

Ojalá pudiera saber lo mucho que la amo. 

Cierro mis ojos con fuerza y me desarmo cuando siento sus labios en mi mejilla.

—La canción es hermosa, James.

Me tardo en contestar. No quiero que se aparte de mí. 

—Te has lucido por completo, muchas gracias —continua. 

Se separa de mí, y me veo obligado a regresar mi mirada a su preciosa cara.

—No me des las gracias, Cam —digo sincero—. Todo lo que has escuchado son mis sentimientos expuestos para ti. Quería que la escucharas porque quiero que tengas en claro que todas esas emociones y sensaciones ya no son mías. Son tuyas. Siempre ha sido así, Camille. Estaba totalmente errado. Tú no eras mía —Hago una pausa al ver que sus ojos se inundan de lágrimas—. Yo era tuyo desde el principio, y a pesar de que no estemos juntos nunca más, yo siempre, siempre te perteneceré.

—No sabes lo mucho que me hubiese gustado escuchar esto hace meses —murmura, con la voz quebrada—. Te juro, James, que si hubieras llegado hace maldito medio año, me lanzaría a tus brazos sin pensarlo, pero ahora, ahora es diferente. 

Me levanto de mi asiento y me pongo de rodillas frente a ella. Tomos sus manos y le pido que me mire.

—No tiene porque serlo. Camille, sé que me sigues queriendo. Lo veo en tus hermosos ojos —Libera una de sus palmas de mi amarre y me acaricia el rostro con ternura—. Te pongo nerviosa. Sigo alterándote, sigo causando algo en ti. Por favor, no me niegues la oportunidad de hacerte feliz.

—James, no puedo hacerlo... tengo a Josh, y él me ama.

—¿Pero qué hay de ti? ¿En verdad lo amas?

Tarda en contestar. La he confundido. Bien, eso está muy bien. Al menos la he hecho dudar acerca del amor que le tiene al imbécil de su novio. 

—No voy a mentirte. Sigo sintiendo algo por ti —Detiene su mano en mi labio—. Eres mi primer amor y siempre te voy a querer, pero Josh supo hacerme sentir algo que tú nunca podrás darme.

Ahora soy yo él que desvía la mirada.

—¿Y qué es? —pregunto.

Mi pecho se contrae mientas espero la respuesta que sé que puede acabar con la poca dignidad que tengo.

—Él me hace sentir viva —susurra—. Y... estar contigo era como estar cavando mi propia tumba.

Camille pesca las gotas de agua que me han salido de los lagrimales. Ni si quiera me he dado cuenta de que estoy llorando al igual que ella.

Cuando eras mía©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora