My Roommate ✘ k.th + k.sj

DOS

Taehyung PDV

Después de comerme mi delicioso churro, mientras iba caminando por un parque, decidí sentarme en la banca para pensar bien mis opciones. El periódico que llevaba en la mano llevaba completamente tachados todos los clasificados. ¿De verdad era posible que todas las opciones de vivienda estuvieran ocupadas? Ya no sabía qué más hacer, me estaba quedando sin opciones y a este paso tendría que empezar a asimilar la idea de volverme a mi ciudad sin nada.

Pero entonces me acordé del número anotado en la esquina de mi hoja del periódico con un marcador rojo. Era el contacto de aviso de los chicos que había en el poste. Sinceramente, su aviso se escuchaban un poco extraño, pero supongo que no es nada que no pueda manejar, después de todo me había venido a un ciudad que no conocía solo y no debería porque tener miedo de ellos, ¿o sí?

Bueno, tal vez si, pero mejor esperemos que no.

Saqué mi teléfono, tecleé en la pantalla y llevé mi celular a mi oído mientras escuchaba los pitidos.

Ring... ding... dong. Sonaron los pitidos del teléfono.

—¿Aló?, ¿quién habla? — escuché una suave voz contestarme.

— Mucho gusto, mi nombre es Kim Taehyung, tengo 19 años. Hay un aviso que vi sobre la habitación que estaban ofreciendo en su apartamento y pues estoy interesado— hablé con voz calmada mientras jugaba con el periódico en mi mano.

—Ah sí... ¿qué te parece si vienes mañana?—continuó la voz suavemente.

—Claro, ¿mañana a qué hora?— mordí mi labio y miré mi reloj.

— Estamos libres a las cinco de la tarde. ¿Estaría bien? Te enviaré la dirección a este número.—

—Bueno, a esa hora estaría perfecto— respondí, no es como si tuviera planes aparte de mirar de cara el vacío y lidiar con una crisis existencial.

— Vale, entonces nos veremos mañana— confirmó alegre.

"Está bien, adiós" lo escuché colgarme. Suspiré cansado.

Tal vez, solo tal vez todo estaría mejor...

Al día siguiente, estaba parado enfrente de la puerta en la dirección que me habían dado. Era un edificio de ocho pisos de unos veinte años de antigüedad por lo que no contaba con todas las tecnologías que había en otros edificios más modernos de Seúl. Sin embargo, no es comparable a los pequeños edificios que abundan en mi ciudad natal. El apartamento estaba en el último piso, afortunadamente había ascensor.

Me armé de valor, la cita era a las 5 de la tarde. Miré mi reloj... 4:59... 5:00.

Toqué la puerta tres veces, escuché unos gritos adentro y unos pasos acercándose hasta que sentí que abrieron la puerta.

Levante mi mirada y me encontré con un chico de ojos pequeños, lindas mejillas y una sonrisa angelical. Era muy lindo, tenía el cabello rubio, era unos centímetros más bajito que yo y parecía de mi edad.

— ¡Hola! Mucho gusto, mi nombre es Park Jimin—  dio una pequeña reverencia, yo lo imité. —Tú debes ser Kim Taehyung, ¿no es así?—  preguntó cordialmente.

— Sí, soy yo— admití un poco tímido.

— Adelante, pasa— hizo gestos para que entrara, me quité los zapatos y me puse las pequeñas zapatillas que tendió delante de mí. — Espera un momento aquí, siéntate en el sillón, ponte cómodo. —  desapareció por un pequeño pasillo,

—Ratataaaaaaaa— lo escuché gritar en el fondo, ¿No era ese el nombre de un pokemon?

—Jimin-ssi, te he dicho 3924892304823094 que no digas así, hyung, ¿Qué pasó?— Ratata respondió con una voz cansada.