My Roommate ✘ k.th + k.sj

VEINTE - friends

Seokjin llegó a la oficina. Normalmente pasaba allí gran parte de su tiempo, él era monitor de un profesor y por lo cual el señor le había dado las llaves libremente para accediera al espacio cuando quisiera. Tener aquella facilidad dentro de la universidad era bastante agradable y le hacía sentir especial de alguna manera. Estar en ese escritorio caoba frente a la pantalla de su ordenador y aislado del mundo exterior, siempre lo hacia concentrarse en sus labores, logrando que se sintiera productivo y satisfecho al final del día.  Sin embargo, había una dificultad intrínseca que estaba impidiendo que las palabras de su tesis salieran.

“Kim Taehyung”... Su vecino había estado en su mente cada segundo de esas últimas tres semanas. Alarmado al principio, después de esa noche en la que el susodicho fue a dormir con Jimin, ese fue sólo el comienzo de un distanciamiento tan grande que estaba haciéndolo estresarse más día tras día, como una olla a presión.

Recordaba con claridad la primera semana, pensando que el chico necesitaba un espacio después del altercado que habían tenido para volver a la normalidad. Bueno, aquello había cambiado durante el transcurso de la segunda semana, Taehyung sólo parecía alejarse más y más a cada segundo que pasaba, el se sentía bastante impotente y sinceramente enojado, porque no había hecho nada que fuera tan malo como para merecer tal reacción. ¿O sí?

Se preocupaba por Jimin, claro estaba. El chico de ojos lindos y manos pequeñitas era como un hermanito para él y por eso la idea de que un nuevo amigo quisiera pasar por encima de su corazón con motivos egoístas lo enojaba, por eso fue que lo confrontó ese día, nadie iba a lastimar en Jimin.

A pesar de eso, había una pequeña voz en su cabeza hablando entre todo el ruido que le decía “¿Estás haciendo todo eso por Jimin o por ti?”. Después de que Jimin le asegurara que todo estaba bien, y verlo un par de días riéndose a carcajadas con Taehyung cuando salían del apartamento vecino, algo se removía dentro de él.

Si Jimin estaba bien, ¿por qué seguían peleando?

¿Qué era ese disgusto que sintió en el estómago cuando vio a aquel chico hace unas horas con sus manos sobre Taehyung? No sabía quién era, pero lo quería muy lejos de su chico. Su chico... ¿Su chico? Su roomie, querrá decir, Seokjin sacudió esos pensamientos raros de su cabeza.

Observó el reloj en la pared, queriendo golpear la mesa con su propia cabeza al darse cuenta de que sólo logró escribir dos párrafos en una sola tarde y nunca se sintió tan poco productivo como en ese momento.

Su frustración crecía cada segundo que pasaba y recordar la discusión con el menor, le dejaba un sinsabor en la boca que quería olvidar aunque no pudiera de dejar de pensar en ello. “Taehyung, ¿No te cansas de correr en mente todo el día?” se rió de su propio chiste, mientras cerraba con candado la oficina cuando sintió una palmada en la espalda.

— Kim Seokjin, reconocería esa risa de limpiavidrios en cualquier parte, atraparte ahora es un milagro, bendecidos y afortunados con tu presencia. — volteó al escuchar aquella voz y sonrió al ver al chico alto frente a él.

— Chanyeol, hola. — se fijó en el chico a su lado y sonrió aún más. — Jaehwan, llevaba tanto tiempo sin verlos.

Si bien, los coreanos no eran muy afectivos por naturaleza de su cultura, Jin no pudo evitar abrazar a sus dos amigos, no se había cruzado con ellos desde hace demasiado tiempo, todos en carreras diferentes y a punto de graduarse, era prácticamente un milagro, como lo había dicho Chanyeol.

— Nos encontramos en los baños e íbamos a llamarte a ver si querías tomar con nosotros. — comentó Jaehwan con ligereza y lo mostró a Jin que efectivamente, le había mandado mensajes, pero Jin no había revisado su celular.