CAPÍTULO 2

4.5K 114 1
                                    

Aitana

No he podido evitarlo. Cuando he mirado la foto de Luis algo por dentro se ha roto, y ha hecho que salga en forma de notas afinadas y emoción.
No sabía qué me estaba pasando, pero esa canción me estaba haciendo pensar.
En él.
La clase de Los Javis termina, y yo no puedo tener más ganas de llorar.
¿Qué me está pasando? ¿Echo de menos a mi amigo? ¿O es algo más?
Jo, qué ganas de llorar, en serio.
Ojalá estuviera la habitación abierta para poder refugiarme de las mil cámaras que me enfocan a la cara cada vez que alguien nombra o insinúa algo de Cepeda.

Después de cenar, decido meterme a la habitación antes que mis compañeros. El candado ya no está echado, y yo no tengo el cuerpo para risas. Aunque me fastidia, porque me gustaría en el alma aprovechar los últimos momentos aquí. Queda poco concurso. Sobre todo para Ana o Roi, dos pilares gigantes aquí dentro.

Sobre mi almohada está el jersey de Luis. No dudo en ponérmelo para dormir. Huele a él. Eso quizás no me ayude a no llorar, pero es mi momento drama de la semana y con los olores todo se profundiza.

-Te estaba buscando. Vamos a jugar a Villa OT, ¿te apuntas?

-No, Roi, lo siento. Estoy cansada.

Me rompo al hablar y Roi lo nota. Quizá sea el que mejor nos lo hace pasar, pero también sabe escuchar cuando lo necesitas.
Y yo lo necesito.
Necesito en este momento a alguien que quiera a Cepeda tanto como yo.

Roi me abraza, como si una bombillita se hubiera encendido sobre su cabeza y supiese porqué estoy así.

-Él también te echa de menos, Aitana.

-No lo sabes.-respondo entre lágrimas y sollozos.

Aunque lo hiciera, seguro que no de la misma forma que yo. Imposible.
Es imposible que él esté sintiendo este maremoto recorriendo su cuerpo.
Soy su hermana pequeña, palabras suyas. Y sí, aunque yo también le llamé "hermano mayor", ahora me doy cuenta de lo equivocada que estaba. De lo que me engañaba a mí misma.

No tengo hermanos, pero dudo que sintiera por ellos algo así.

La necesidad de un abrazo, de arroparme a su cuerpo y clavar mi cabeza en su pecho. Y que el mundo se venga abajo, que me da igual cuando él besa mi pelo y me susurra "pequeña".

-Aitana, él te echa de menos y te quiere. Lo sé, y tú también.

-No me entiendes, Roi...

Pero algo en la mirada de Roi cuando nos separamos del abrazo hace que crea que sí me entiende.
Debería tener esta conversación con Amaia o con Ana, pero Roi es de mis mejores amigos aquí dentro, también, y al serlo de Luis... Quizá el pueda entenderme.

-Explícamelo, Aitana. No te voy a juzgar.-dice con una sonrisa.

Interpreto con ese comentario que se refiere a Vicente, y me alegro muchísimo de que use tal eufemismo para no nombrarlo.

-Creo que le echo demasiado de menos.-Roi asiente.- Como no he echado de menos a nadie aquí. No digo de compañeros, sino general. De mi familia, mis amigas, mi nov...

Cuando rompo a llorar de nuevo, Roi me abraza con más fuerza y entre sus brazos y con el olor del jersey, por un momento me imagino que Roi no es Roi y que él está aquí.
Sonrío sin darme cuenta.

-Chicos, os estamos esperando.

La puerta se abre mientras Agoney nos llama.

Y una cámara nos enfoca desde la lejanía.

PROCURO OLVIDARTEWhere stories live. Discover now