CAPITULO 14

3.1K 106 4
                                    

Aitana.

No puedo evitar echar la vista hacia Luis cada vez que puedo. Está solo, en la barra, sosteniendo una copa y con su vista clavada en mí.

Joder.

Qué mirada.

Me está haciendo un repaso de arriba abajo y es la primera vez que no veo atisbo de algo fraternal. Me está mirando como mujer.

O ya me miraba así y nunca me di cuenta.

Tampoco soy idiota, y sé que su atención también se descentra cuando ve con quién estoy bailando.

Pero, ¿qué voy a hacer? Es mi novio y está aquí después de tres meses. No creo que hoy sea el momento más oportuno para decirle que estoy confundida.

Aunque cada vez veo menos confusión en lo que me pasa.

Comienza a sonar Madre Tierra y los gritos de Ricky se oyen desde lejos.

-Es un buen tío Ricky. Hemos estado hablando y me cae muy bien.

Le sonrío, sin poder evitar pensar si habrá hablado con alguno más de mis compañeros.

Vicente se acerca a mí y me da un beso. Pero beso, beso. De esos que me da hasta vergüenza hacerlo en público.

Y con qué público.

Oigo un carraspeo cuando su lengua aún está dentro de mi boca, y por un momento temo que sea Luis. Pero qué va, él no haría eso y creo haber reconocido de quién se trata.

-¡Hola, Vicente! Qué ganas de conocerte bien... Que en Valencia apenas pudimos saludarnos-dice Ana.

No es la única de mis amigos que está aquí. Alfred y Roi la acompañan y de fondo veo cómo Amaia se acerca.

Vicente le da dos besos a Ana y Amaia, y un apretón de mano a mis dos amigos.

Esas cosas siempre me han cabreado. ¿Por qué la sociedad decide que a las mujeres dos besos y a los hombres la mano? Es una tontería de machito que nunca entenderé.

Roi hace bromas, seguido por Ana y con un Alfred que permanece atento a la conversación, creo que sin hablar mucho por si dice algo inadecuado.

Todos los presentes, excepto mi novio, saben mis sentimientos por Luis, pero Alfred fue el más sorprendido al enterarse.

-Oye, Aiti, ¿me acompañas al baño?

Amaia me mira de una forma extraña al hacerme la pregunta, por lo que asiento sin rechistar. Tampoco es que no la hubiera acompañado de cualquier forma.

-Te dejo un momentito con ellos, ¿vale?

Cepeda.

Raoul y Agoney bailan y gritan 'tambor, tambor' y solo son superados por el espectáculo que se están montando Mireya y Ricky con la canción, subidos al escenario con Javi Calvo, que está haciendo de dj.

Miriam me lanza una mirada de ánimo cuando ve a mi grupo hablar con Vicente y Aitana.

Quizá no nos llevamos del todo bien ahí dentro, pero puede ser el comienzo de algo bonito fuera.

Amaia y Aitana desaparecen del grupito, y recuerdo lo que me ha dicho antes Amaia.

¿Es una táctica de mis amigos para alejarla de él, y quizá darme unos minutitos?

Así que, al parecer, mis amigos no estaban tan despistados como yo creía. No me estaban dejando solo en una barra, sino que estaban pensando la manera de ayudarme a estar con ella.

Las sigo, de lejos, sin querer llamar la atención. Se dirigen hacia el baño, y yo con ellas.
Pero en lugar de entrar en los lavabos, Amaia abre con disimulo la puerta de 'prohibido el paso' de al lado.

-¿Qué haces, Amaia?

-Alfred ha hablado con el camarero, dice que aquí estaréis tranquilos porque solo está la cena fría que no la sacarán hasta dentro de una hora.

Aitana la mira confundida, pero lo entiende todo cuando me ve.

-Os dejo.-dice mi amiga de Pamplona dándome una palmadita en el hombro con una sonrisa en su cara.

Sigo pensando que es muy fuerte que hayan montado todo esto por nosotros.

Parece que el team Friends es más real de lo que creía.

-¡Pues yo tenía que ir al baño de verdad!-se ríe Aitana.

Antes de que pueda decir nada, se lanza corriendo hacia mí y me da un abrazo.

Uff. Lo necesitaba. Sé que en la final, hace apenas unas horas también estábamos así. Pero no es lo mismo.

Aquí no hay cámaras, no hay gente, no hay focos.

Aquí solo estamos ella y yo. Demostrándonos una vez más que lo que sea que haya entre nosotros es real.

-Voy a matarlos cuando los vea.-dice con su cabeza en mi pecho.

-Pues yo creo que les quiero un poquito más a los cuatro después de esto.

Aitana se ríe y se separa un poquito.

-Me hubiera gustado estar más contigo esta noche.

-No te preocupes, lo entiendo. Es normal que quieras estar con tu novio.

-Claro, igual que tú querrías...

Entonces me mira de una forma extraña, como inquisitiva. Hay algo que quiere saber, y yo no voy a dar tiempo a que lo pregunte. Sé qué está recorriendo su mente. Y en vez de decirle que no hay nadie esperándome en casa cuando llegue, decido ir más directo al grano.

-Yo solo quiero estar donde estés tú.

PROCURO OLVIDARTEWhere stories live. Discover now