El Placer de Amar. ~ ~ CastielxSucrette [Corazón de Melón]

🌸Capítulo 55-Especial 300 seguidores 1/3🌸

Pv's Sucrette

Me encontraba de camino a una firma de libros, pero no sola, si no, acompañada de Castiel quien me llevaba tomada de la mano. Me hace feliz que él esté nuevamente conmigo, ha pasado aproximadamente una semana desde que me pidió matrimonio y al siguiente llegó con un hermoso anillo de plata con tres diamantes incrustados. Algo realmente exagerado de su parte, pero él solamente me respondió con un «Eres lo mejor que me ha podido pasar y por lo mismo, quiero darte lo mejor para ti también.»

En la firma de libros, en vés de preguntarme sobre el mísmo, me preguntaron sobre Castiel. Quién era él, cómo se llamaba, cómo nos conocimos, si éramos novios o también, si estábamos por casarnos, lo que me hizo pensar que más de una persona se habrá percatado  del anillo. En esos momentos, agradecía que éstas personas no hayan conocido a Evan, agradezco que a él le haya desinteresado mi profesión, por lo que nunca me acompañaba a éstas cosas.

Luego de firmar algunos libros u otros artículos y tomarme fotos con alguna que otra persona, Castiel me invitó a una cena romántica en uno de los más lujosos y caros restaurantes de la ciudad. Creo que el día no podría mejororar, pero claro que sí. Hoy sería la primera noche en nuestra casa nueva.

Pensamos mucho en sí arrendar un departamento o comprar una casa, pero finalmente optamos por la casa, así tendríamos mucho más espacios y no tendríamos quejas si hacemos alguna celebración más o menos ruidosa. Además de que tendrá un gran jardín trasero para Hades. Castiel me explicó que días antes de irse hace cinco años, él le había dejado a Hades con sus padres, debido a que no tendría donde dejarlo por culpa de que en el departamento no permitían mascotas, también porque estaría constantemente en movimiento. Pero su lazo jamás se rompió, cuando lo fuimos a buscar, la reacción de Hades fue realmente conmovedora y no puedo dejar atrás a Castiel. Hades ya era un perro adulto y le encontró mucho parecido a Demonio, cosa que hizo que inevitablemente Castiel soltara unas pocas lágrimas de nostalgia al recordar a su viejo compañero de vida y que ahora, en paz descansa.

Nuestro hogar era realmente acogedor y moderno, era quizá más grande que la misma casa de Evan, la cual había que admitir que era realmente hermosa, pero ésta era distinta o eso parecía, ¿Por qué? La única razón lógica era porque sería la casa que compartiría con Castiel toda mi vida de hoy en adelante.

—Es grandioso, ¿Verdad? —Me dijo él, acostado ya en nuestra cama matrimonial solo con sus bóxer puestos. Yo me encontraba frente a él, quitándome mi ropa para ponerme pijama.

—¿Todo ésto? —Inquirí con una sonrisa mientras tomaba un camisón para poder ponérmelo. Estaba solamente en bragas en esos momentos. — Lo es, es increíble.

—No te pongas eso, ven acá. —Me pidió mientras me regalaba una mirada bien pícara, a lo cuál yo solo respondió obedeciendo y luego, me subí a la cama, yendo a gatas hacia a él  — Mañana hay que hacer una fiesta con los chicos y chicas, ¿Te parece?

—Claro, me parece bien. —Acepté encantada, sentándome después a horcajadas sobre él. — ¿Qué tal si por ahora, estrenamos la nueva casa, mnh? —Propuse con una mirada al igual que con una sonrisa pervertida, recibiendo como respuesta una fuerte nalgada.— ¡Ah!

—Jamás me cansaré de hacer eso. —Se rió para después dejarme bajo de él y de un tirón, me quitó las bragas, posicionándose entre mis piernas. — La otra semana comenzaremos a hacer los preparativos para la boda, ¿Te parece?

—Nos casaremos en dos meses, ¿No te parece muy apresurado? —Me reí y él se acercó a besarme los labios de manera juguetona.

—Quiero lo más pronto posible que todos sepan que eres mi esposa, que solo eres mi mujer y nada ni nadie podrá separarme de tí. —Juntó su frente con la mía, mirándome directamente a los ojos. — Te amo, hermosa.

—Yo te amo a ti, Cassy. —Dije antes de que él entrara en mi de una sola estocada.— ¡Ah, Castiel!—Gimoteé su nombre, mordiendo luego mi labio inferior para callar los siguientes que eran causados por las siguientes embestidas que éste me propinó.

Continuamos así quizá por una hora o más, hasta fuimos a darnos una larga ducha juntos en donde también hicimos el amor hasta cansarnos. Estábamos felices, amábamos estar juntos y vamos, había que recuperar el tiempo perdido, ¿No? Digo, no es como que todo fuese hacer el amor y nada más, pero hay que ser realistas, el cuerpo reacciona de una manera que hace necesitar el cuerpo del otro de una manera exagerada.

Al día siguiente nos levantamos y llamamos a nuestros amigos para poder comenzar a organizar la fiesta, hasta le habíamos pedido a Iris y a Nathaniel que tocaran en nuestro jardín tal y como hicieron en el sótano de nuestra antigua escuela, me hacía ilusión el poder revivir tan buenos recuerdos como lo fueron esos, así como mi primer día de escuela y conocí al hombre con el cual jamás pensé que podría escribir una tan grande historia, era realmente sorprendente.

Terminaba de poner algunos platillos ondos con cosas para picar en la mesa del jardín cuando de la nada se me comenzó a nublar la vista y unos mareos se me vinieron, haciendo que yo estuviera obligada a afirmarme de la mesa para que no me tambaleara y cayera. Parece que Castiel tenía razón y me estoy emocionando demasiado con todo, pues no he dejado de hacer cosas desde muy temprano para que nuestra pequeña reunión fuese más o menos aceptable y divertida.

Volteé hasta donde estaba Castiel, él estaba jugando con Hades muy animadamente después de mucho tiempo, realmente ellos se extrañaban. Me iba a acercar a ellos para cuando escuchamos el timbre de la entrada así que me volví a abrir para abrirles a los invitados mientras que Castiel fue a arreglar algunas cosas que faltaban en el pequeño escenario que montamos.

Abrí la puerta de la entrada y ahí estaban todos. Lysandro, Nathaniel, Kim, Iris, Violeta, Armin, Alexy, Melody, Karla y su novio, Rosa, Priya e incluso Kentin. Tal vez todos ellos quedaron para venir juntos.Sonreí.

—¡Adelante, pasen! —Les indiqué haciéndome a un lado para que ellos pasaran, aunque más de uno me dió un regalo, ¿Por qué? No lo sé.

—Son por la casa nueva, de verdad se lucieron —Dijo Armin, quizá porque vio mi rostro de interrogación en lo que miraba los obsequios. Él al entrar comenzó a mirar a todos los rincones de la vivienda hasta que su mirada se posó sobre la PlayStation4 y a su lado, la Xbox360. Sus ojos brillaron de tan solo mirarlos y eso que aún no ha abierto los cajones en donde Castiel tiene todos sus vídeojuegos.

—Muchas gracias a todos. —Agradecí con una sonrisa, dándole un abrazo a casi todos por haberse tomado el día para venir. Al fin estabamos reunidos como los viejos tiempos.

Les indiqué a todos que ingresaran al jardín trasero y para cuando yo me disponía ir con ellos, el timbre volvió a tocar. Que raro, ¿Castiel habrá invitado a alguien más?

Fuí a abrir la puerta y lo primero que sentí fue un golpe en mi mejilla. Una abofetada. Quedé con los ojos bien abiertos por la sorpresa, no me esperaba eso para nada. Cuando volteé, me sorprendí al ver a aquella chica en frente de mí, no esperaba verla en mi casa. Bueno, no me esperaba verla en mi vida.

Ella me miraba con el ceño fruncido y sus dientes bien apretados, estába de más decir que la rabia emanaba de su cuerpo y no la culpaba, entendía sus razones.

—He pensado mucho sobre todo... Pero fue suficiente. —Comenzó a decir de manera molesta, dando un paso hacia mí. — Haz arruinado nuestras vidas y yo me encargaré de arruinar la tuya.

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PERDÓN, Si no subí ayer, para cuando me di cuenta me había dormido XD llegué cansadísima de mi práctica y me dolía mucho la cabeza, por eso me dormí tempranísimo, pero aquí estoy devuelta para escribir más capítulos para mis queridas lectoras.❤🌸 Se viene algo fuerte en los próximos dos capítulos 😂👌