Capítulo 47

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Miércoles.

Son las 12:00md habíamos salido temprano y nos dirigimos a la cuidad, durante el trayecto no me di cuenta cuando me quedé dormida, sólo sentía un cosquilleo en mi mejilla, apreto el párpado y abro los ojos. Estamos en el estacionamiento de la casa de Santiago, bajamos y nos adentramos a la casa, Juanita como siempre nos abre la puerta y nos saluda. Al parecer ninguno de sus padres están aquí, subimos a la habitación.

Me tiro boca abajo en la cama. -Tengo sueño.

-Aquí puedes seguir tu siesta. -Siento la cama hundirse y besos en el cuello.

-Mejor no, lo que más deseo es comer. Creo que me comería un elefante entero. -Volteo y miró el techo.

Ríe. -Vamos a comer algo. -Se levanta y me extiende su mano, la tomo y salimos de la habitación.

Juanita nos sirve almuerzo y empezamos a comer. Al terminar volvimos a subir, afuera hacia mucha calor como para estar en el patio.

Comencé a revisar mi instagram, estaba recostada en el pecho de Santiago.

-Eres tan hermosa Samantha.

Levante la mirada para encontrarme esos hermosos ojos celestes y le sonreí.

En un movimiento rápido, me encuentro sentada en sus regazos, toma mis mejillas con sus manos mientras hundo mis dedos por su cabello. Une nuestros labios es un cálido y tierno beso, cierro mis ojos al sentir una corriente eléctrica recorrer todo mi cuerpo, sus manos bajan por mi espalda hasta llegar a mi trasero, el beso se vuelve más fuerte, dejando escapar un gemido de mis labios, puedo sentir su erección duro debajo de mis muslos, sus manos comienzan a recorrer mis piernas debajo del vestido, dejan de hacerlo para bajar el ziper, Santiago me aparta dejándome sobre la cama, poniéndose sobre mi sin aplastarme, estoy tan perdida en cada movimiento que me doy cuenta que estoy en ropa interior ante sus ojos, su lengua lame mis labios haciendo un camino desde el módulo de mi oreja hasta mi abdomen, quita su camisa y estoy decidida a parar pero mi cuerpo me exige que siga, prenso mis uñas en su espalda, siento que succiona en mi cuello, estoy segura que me dejara marca.

-Santi...debemos parar, alguien puede entrar.. -Susurro.

-Nadie lo hará. -Gime en mis labios.

Estampa sus labios contra los míos, en un beso más hambriento que el anterior, mis manos bajan por su pecho hasta llegar al botón de su pantalón, él parece entender mi propósito y antes de que logre quitarse la prenda que se interponía, dos toques a la puerta hace que nos separemos.

Escucho a Santiago maldecir. Lo miro con las cejas alzadas. -Lo siento. -Dice mientras coloca su camisa, busco mi vestido y lo colocó, él me ayuda a subir el ziper.

-Adelante. -Dice, encendiendo los vídeo juegos.

Sarah entra con una hermosa sonrisa, lleva puesto un vestido elegante esmeralda con tacones flats beige.

-Sammie. -Me saluda con un beso en la mejilla. -¿Hijo ya no saludas a tu madre?

Miro a Santiago quien no se digna a levantarse, me rio sin que Sarah se de cuenta de lo que está pasando, niego con la cabeza, él sólo coloca un cojín ocultándolo.

-Si madre pero acercarte tú.

-¿Que tal el otro? -Me mira burlona mientras se acerca a Santiago, le da un beso en la mejilla para luego dirigirse a mi.

-¿Te está gustando la universidad?

Asiento y comienzo a relatarle todo lo que he hecho mientras que Santiago comienza a jugar con los videojuegos.

(...)

Me encontraba en mi casa, Santiago me había traído hace unas horas, estábamos cenando mis padres y hermana.

Mi padre saca el tema de la empresa, diciéndonos que estos meses son muy importantes para la familia, se vienen las aperturas de las empresas extranjeras y una cooperativa entra en la empresa centroamericana.

-George saldrá en menos de un mes para Miami y de ahí se va para Costa Rica. Terminará allá con todos los pendientes para regresar e irse denuevo.

-¿Irás con él? -Pregunta mi madre.

-No. -Niega. -A este no lo acompañaré pero si viajaré con la familia para el segundo que será en dentro de muy poco tiempo. -Aclaró.

Ese será un viaje muy largo. En dos países. Totalmente al otro lado del mundo.

-¿Por cuánto tiempo estarán afuera de Los Ángeles? -Pregunto.

-George me ha conversado que se durará por lo menos tres meses o un poco más.

¿Tres meses o más?

Sin Santiago tres meses.

-¿Sam, Santiago viajará? -Pregunta Emily.

-Me ha dicho que si. ¿Cierto, papá?

-Así es, toda la familia y en Canadá se reencontraran con su tía Olivia.

Su tía Olivia hace tanto no escuchaba de ella, había dejado de vivir en Los Ángeles para mudarse en Vancouver.

-¿Te quedarás sola en el apartamento, todo ese tiempo?

Asiento. -Lo tendré que hacer Emily, no puedo perder clases. Pa, hablando de eso necesito que me ayudes con algo.

Recuerdo el tema de la computadora, sólo espero que pueda con todo este tema del viaje pueda ser que no.

-Dime. -Cuestiona.

-Necesito una laptop, en la universidad la están pidiendo para una de las clases.

-Sam. -Mira a mi madre y ella asiente. -Esta bien, haré lo posible para comprarte una.

-Gracias, no necesita ser una muy costosa, sólo que me sirva para la clase. -Él asiente.

Terminamos de hablar, Emily recoge los platos mientras que yo voy a lavarlos. Cuando termino de dejar la cocina impecable, tomo el pijama y me adentro a la ducha, doy un baño relajante, no tardó mucho en salir, pongo mi bata de batman con unas medias amarillas antes de salir me peino el cabello al frente del pequeño espejo que tengo, cuando lo tengo listo, lavo mis dientes y aplico un poco de crema en la cara, cuando terminó miró mi cuello donde hay una marca, ahorita está roja, mañana me amanecerá horrible. Espero que haya lluvia mañana para poder andar un suéter que me cubra.

Paso las yemas de mis dedos alrededor de la marca y recuerdo lo sucedido hoy en la tarde, por suerte Sarah tocó antes de entrar, no sabría que pasaría conmigo en estos momentos. Saco esos pensamientos y salgo del baño, me dejó caer en la cama, me acurruco con el cubridor.

Tomo mi celular y lo desbloqueo. Entró al chat y como siempre ningún mensaje. Le escribo a Santiago.

Me: Me dejaste marca.

Contesta inmediatamente como si estuviera esperando mi mensaje.

Santi👫❤: Un pequeño recuerdo, amor.

Me: Un hermoso recuerdo pero si me lo ven no estaré viva para recordarlo.

Santi👫❤: No estaremos 😂 tendré que pensar donde los haré la próxima vez.

Me: ¡Santi!

Santi👫❤: ¿Que tal en el abdomen?

                       O en otro lugar por ahí 😏

Me: Suena tentador pero prefiero en el mismo lugar 😂

Santi👫❤: Yo escogería la segunda opción 😢 pero se hará como tú digas y lo siento, espero que Robert ni Michelle lo vean.

Me: Quiero que estés aquí, me he acostumbrado a tu presencia por las noches, amor 😓

Seguí hablando unas dos horas con él hasta que mi sueño me venció, me despedí, puse el celular en la mesita de noche y me dormí.

















Editada.

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