Sin Límites - Fred Weasley y tú

Idiota

Ya era hora del entrenamiento, así que caminamos a la cancha junto con Fred, George y Alicia.

- Llegan tarde- nos dijo Oliver, apenas habían pasado 5 minutos.

- Lo lamentamos- si disculpó Alicia.

Angelina pasó hecha una furia al lado nuestro y me empujó, supuse que recién le avisaban de su reemplazo.

- Estás muerta- susurró, pero no le di importancia.

- Bueno, Fred y George vallan con las lanzaderas, e intenten pegarles a las pelotas que les lance, Harry, acciona una snitch y buscala, en cuanto a ustedes tres, van a tratar de anotar por los aros, una a la vez mientras que yo defiendo- nos dijo a Alicia, a una chica de último año llamada Cloey, y a mi.

Al primer tiro lo hizo Cloey, pero Wood la atajó, igual que con Alicia, cuando llegó mi turno, ya había estudiado los puntos débiles de Wood, así que tenía una idea de cómo hacerlo.

- Tu turno Jordan- dijo Oliver. Lancé la quaffle que entró en el aro de la derecha. Alicia y Cloey aplaudieron.

- Nada mal- agregó Wood- ahora intenta hacerlo, pero pegale con la cola de la escoba-. Lo hice, y la quaffle salió disparada pasando por el centro del aro del medio.

- Eres una cazadora nata- dijo Oliver mientras Fred y George aplaudían y silbaban desde abajo. Wood les lanzó una mirada asesina, y siguieron con lo suyo.

Luego del entrenamiento fuimos al vestuario.

- Lo hiciste muy bien- me dijo Fred, y yo me limité a sonreír.

- Bienvenida al equipo- me dijo Wood entregandome el equipo de Gryffindor, que tenía escrito Jordan detrás, y el número 21.

- Gracias- dije y todos aplaudieron.

Cuando volvimos a la sala común no vi a Fred por ningún lado, así que pensé que se había ido con George, pero este se encontraba con Alicia.

- Vieron a Fred?- pregunté.

- No, creía que estaba contigo- dijo George.

- Gracias- dije y subí a mi habitación, probablemente nos encontrábamos mañana en el desayuno.

Desperté y bajé a desayunar.

- No te vi anoche- dije a Fred.

- Ah, si- dijo un poco incómodo. Eso me desconcertó, pero decidí no darle importancia.

Luego de pociones, debía ir a transformaciones, pero en el camino me encontré con... QUÉ?! no, no es posible, él nunca me haría esto, no... era Fred besándose con, nadie más y nadie menos, que Angelina. No pude controlarme y las lágrimas comenzaron a caer, pero no iba a quedarme de brazos cruzados, así que me acerqué a ellos y lo separé de Angelina.

- ERES UN IDIOTA FRED WEASLEY- dije y salí corriendo a la sala común.

Llegué a mi cuarto y lo primero que hice fue acostarme a llorar. ¿Porqué?, era obvio, como alguien como yo, podría estar con alguien como él, tiene a más de la mitad de las chicas de Hogwarts a sus pies, como se me podía ocurrir que iba a elegirme a mi, fui tan tonta; sin embargo, las lágrimas no dejaban de salir, por más que quise parar no pude, hasta que me quedé dormida...

Alicia me despertó y bajamos a almorzar.

- _____, qué pasó?- me dijo una vez que estábamos abajo con George.

- Fred- dije, y les conté todo lo ocurrido.

- Voy a matar a ese idiota- dijo George enfurecido.

- No quiero que esto sea motivo de una pelea con él George, déjalo así-.

- Pero que hijo de perra- soltó Alicia -aunque es muy extraño-.

- Lo sé, pero no quiero darle muchas vueltas- dije haciéndome la indiferente, aunque en realidad si me importaba, acababa de romper mi corazón.

- No te hagas la dura _____, acaban de romper tu corazón, puedes descargarte con nosotros- respondió George, seguro había leído mis pensamientos, así que lo miré mientras una lágrima caía por mi rostro y lo abracé. Él se limitó a abrazarme sin decir nada, y Alicia se le unió. Muchas veces eso es lo único que se necesita, un abrazo, ya que suelen decir mucho más que las palabras.

Los solté, y noté que dos personas se acercaban por detrás de George.

- Hola chicos- saludó Fred como si nada hubiera pasado, si se podía ser tan caradura.

- No puedes ser tan caradura de venir y sentarte con ella y hacer como si nada hubiera pasado- dijo Alicia, que parecía más enojada que yo.

- Déjalo así Alicia, no vale la pena- dije parandome para irme, pero Angelina me frenó.

- Quién es la ganadora ahora- me dijo entre risas.

- Si te conformas con las sobras de otra, allá tú- dije, pero Fred habló.

- Que fue lo que pasó, además de que _____ está celosa de lo de Angelina y yo- dijo Fred, pero antes de que pudiera hacer algo, George se lanzó sobre él.

- Retira lo que dijiste idiota!- gritaba.

- Sueltame estúpido!-.

- Chicos paren!- gritaba mientras con Alicia intentábamos separarlos, pero llegó Lee junto a Cedric, y nos ayudaron.

Lo único que quería era salir de ahí, pero no era tan cagona como para irme sin hacer nada, así que le pegué a Fred una cachetada y fui al lago negro, lo que fue una muy mala decisión, porque los recuerdos sobre esa hermosa noche que habíamos pasado justo en ese lugar me invadieron, y dejaron escapar unas cuantas lágrimas, ¿alguna vez Fred me quiso de verdad?, era la pregunta que invadía mi mente y no la dejaba en paz.

Pasé la primera hora de la tarde caminando por ahí, y luego regresé a la sala común, donde mi cadenita se enganchó con la camisa, y recordé el momento en el que me la dio, jamás había sido tan feliz en toda mi vida, con Fred aprendí lo que es el amor de verdad, y también lo que son la decepción y un corazón roto... lástima que él no sentía lo mismo por mi...