🍫 His Smile 🍫 [Yugkook]

ʕ •ᴥ• ʔ (91)

A la mañana de un viernes YuGyeom estaba reposando su cabeza contra la mesa entre interminables sonidos de dolor.

Ya habían pasado dos días en los que no veía a su Hyung, a pesar de que dijo que no quería verlo porque quizás cometería un error, aún tenía esa esperanza que cruzara por la puerta y actuara como si nada hubiera pasado.

Además que intentó olvidarlo todo, pero cuando más lo intentaba menos podía, y digamos que sus demás amigos, ni siquiera la gente del bar era de ayuda. En ese día viernes ya el nombre de Jungkook, "el cantante guapo de Seasons", había sido mencionado como 7 veces en el bar, y YuGyeom comenzaba a perder la cordura.

¿Cómo podría olvidar a alguien que vino a revolotear todo en su interior sin descaro?

Quería no darle más rollo a la cinta, pero era imposible.

Por otro lado, Jungkook en esos dos días se había descargado de la forma más fea que podría imaginar. Sus brazos ya estaban repletos de arañazos como si un gato hubiera pasado por ahí, además que su cuerpo estaba en vivas marcas rojizas y moradas por culpa de su novio.

Se había ido con él un día entero, a la noche del miércoles tuvieron sexo sin tanta dulzura, y a la mañana siguiente del jueves Jungkook le pidió si podría quedarse o él ir a la casa de Sehun. Al final del día, Sehun por fin había abandonado esa casa dejando a un dolido Jungkook atrás.

Intentó descargarse, y por más que los labios de su novio estuvieran sobre los suyos solo se encontraba con la viva imagen de su menor en frente y eso le quitaba la calentura (o quizás le aumentaba, pero no lo admitiría)

No obstante, su boca nunca soltó su nombre, su mente gritaba ese nombre, pero su corazón aún conservaba ese amor por el único chico que le hizo tocar la luna desde el principio; su novio Sehun. A pesar de las peleas que tenían, seguía aferrado a esa cuerda ligera de amor que no lo iba separar nunca de él.

O al menos eso piensa por ahora.

Soltando un suspiro el amanecer del día viernes lo sorprende, ve la hora y ya son las 12 de la tarde, no recuerda el horario en el que se acostó ni qué hora se habrá ido su novio, pero si de algo estaba seguro es que iría al bar, no por cuenta propia, sino porque Taehyung le había obligado a ir juntos ese día.

Luego de un par de preguntas del porque había desaparecido dos días (y sin que Jungkook le contestara nada) ambos estaban camino al bar, Jungkook desganado con su guitarra en mano y Taehyung comiendo una paleta helada mientras tarareaba alguna boba canción que pasó por su mente.

Mientras el menor miraba el piso, Taehyung estaba más radiante que antes, y ni aún así le pudo compartir su energía a su desganado amigo.

Apenas entraron al bar el rostro deprimido de YuGyeom los observó, pero apenas se dio cuenta que Jungkook había vuelto esa tarde al bar lo sorprendió.

- Buenas tarde, Hyung's ¿Todo bien? -hizo una leve reverencia cortésmente, evitando la mirada de Kook sobre él- Mark Hyung está en la cocina preparando algo, puedes ir a verlo si quieres Tae Hyung, a no ser que quieras esperar aquí y yo voy por él.

- No te hagas problema. Yo iré a verlo. -acarició los cabellos del menor (aunque haciendo puntitas para llegar a la cabeza de coco) y se fue hacia donde YuGyeom había mencionado dejando a ambos menores solos.

- Hyung... Veo que trae su guitarra. ¿Preparó alguna canción para hoy? -le preguntó a su mayor mientras él tomaba asiento en una mesa, Jungkook copió su acción mirándolo a los ojos sin poder evitarlo.

¿Cómo la misma persona que lo hizo ver estrellas con tan solo un beso ahora se comportaba todo tímido como si ni siquiera supiera de que hablar? No podría entenderlo, o quizás solo estaba avergonzado, era más predecible así.

- No tengo alguna en especial por ahora, cuando sea el momento de tocar se me ocurrirá algo.

- Oh... La gente del bar enserio pregunta por usted cuando no está. Creo que ya tiene un montón de fanáticos que no saben vivir sin usted~ -sonrió con inocencia, Jungkook asintió tímidamente y siguieron conversando de cualquier tema que les tocara.

Ambos estaban a una distancia prudente gracias a una mesa entre medio, y gracias a eso no había problemas en cuanto a su incomodidad. Después de todo ninguno quiso tocar aquel tema que había pasado el martes a la noche, así que se mantuvieron felices así.

Palabras sin cesar, temas que ambos muy bien conocían. La tarde les fue muy divertida, y cuando a Jungkook le tocó ir al escenario se sintió bien de nuevo al tener la mirada brillosa y orgullosa de su menor entre el público como siempre, además de palabras de aliento antes de ingresar y palabras de felicitaciones al bajar.

Al parecer todo iba estar bien con ellos.

Y que nada cambiara le daba tranquilidad a su ansiedad.

❤❤❤❤
Esto iba actualizar ayer y me olvidé. Perdón