Trono

967 80 25
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


"¿La curiosidad mató a la gatita?"


Mi primer intento de regresar con las animadoras es un fiasco total cuando el día martes voy a donde la entrenadora a pedirle encarecidamente que me deje retomar mis prácticas, estoy empezando a podrirme sin hacer nada más que ver un montón de rutinas de baile, necesito un poco de acción.

Acción para olvidar mis estúpidas acciones.

—Vaitiare, aún no estas recuperada del todo, no puedes volver al equipo hasta que tengas un certificado que confirme tu bienestar. —me dice con una sonrisa amable en el rostro.

—Pero fue hace dos semanas ya, mi terapeuta me dijo que era un leve esguince y estaría apta para las animadoras en dos semanas. —oculto la verdad de una manera muy descarada.

Me dijo tal vez una semana más, pero yo me siento más que bien.

Física, no mentalmente.

No puedo estar en paz con mi cabeza.

La entrenadora suelta un suspiro.

—Sé que eres la capitana y por eso mismo te necesitamos al cien, Vaitiare. Necesito ver ese certificado.

Suelto un poco el aire contenido y le regalo una sonrisa.

—Lo traeré mañana mismo. —afirmo.

Después de pedirle a mi terapeuta por alguna clase de certificado para poder iniciar nuevamente con las animadoras y después de que revisara mi tobillo y me dijera que efectivamente aun no estaba apta para continuar, tuve que rogar para que me diera ese certificado durante todo el día martes.

Ella cansada de mis llamadas, accedió, pero con la condición de no trabajo muy pesado de momento.

Mi segundo intento el día jueves fue menos desastroso que el martes, la entrenadora acepto con una falsa sonrisa en el rostro mi certificado y me dejó volver con la misma condición de mi terapeuta.

Salto de felicidad y le doy un corto abrazo a la entrenadora antes de salir nuevamente al pasillo que guía al campo de entrenamiento.

Mi sonrisa y felicidad no puede durar tanto tiempo porque cuando voy revoloteando como una mariposa contenta por el pasillo, me llega un mensaje de texto que me hace sobresaltar.

La felicidad no es eterna ni en un momento como este.

Tomo mi teléfono en manos y presiono para ver el mensaje.

Número desconocido:

Me gusta verte feliz, gatita.

Porque esta semana será muy pesada para ti.

Never (#1)Where stories live. Discover now