Jazmines

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"Por mucho que el lobo quiera parecer oveja, lobo se queda"

Claro que no fue un adiós.

Porque al instante en que cruzaba la puerta, él me tomaba por el brazo y se disculpaba por su terrible comportamiento cuando está de malas.

Y aunque la intención es lo que contaba, no podía dejar escapar que tan solo pedía perdón y me tomaba nuevamente en brazos porque su carnal deseo por mi cuerpo era más fuerte que una simple demanda en esos momentos, pero dejé pasar sus razones porque yo lo necesitaba de igual forma.

Ambos teníamos nuestras catástrofes persiguiendo cada paso que dábamos y la única manera de apaciguar a los demonios era conectándonos de esa tan mortal manera por un par de horas a la semana.

Pasé lo que quedaba de la semana haciendo visitas al departamento de Hyder por un par de horas, nos perdíamos en el cuerpo del otro hasta que las investigaciones en casa apaciguaron su agitación y fue él quien comenzó a visitar mi habitación cada dos tardes de la semana que siguió.

Por otro lado estaba consciente de los problemas que traía tener alrededor a Hyder, después de mi extraña conversación con Lily comencé a prestar más atención a las personas cotillas que con tan solo una mirada mía ponían a temblar todo su cuerpo.

Aunque ciertamente al principio me generó una gran intriga el misterio que es Hyder, con el pasar de los días me fui acostumbrando a lo que era mi nueva reputación entre los pasillos de la preparatoria, lo cual, contradictorio a lo que creía, empezó a adaptarse a mi reciente popularidad en mayor crecimiento.

Los rumores sobre mi "relación" con Hyder no habían hecho nada más que aumentar la seguridad que decaía en mí las últimas semanas, nadie quiso meterse con la "nueva chica" del infierno de mirada esmeralda.

Agradezco que las tensiones por casa se han calmado un poco, por lo que puedo salir con mi auto por la entrada delantera sin tener que preocuparme por las diversas cámaras apuntando a mi rostro. Por otro lado, Margot Fernsby ha decidido abandonar nuevamente a sus hijas al cuidado de ellas mismas mientras se va a un corto viaje de relajación, perfecto para no acumular arrugas en su preciado rostro.

Cierro la puerta del auto y me dirijo con calma por los pasillos hasta llegar a mi casillero para recoger los libros del primer periodo. El bullicio a los alrededores es algo común en estos días, entre enviar las cartas de admisión a diversas universidades en el país y algunos exámenes, los alumnos de último año se encuentran algo más ruidosos de lo normal.

Me tomo unos segundos para recordar en mi inexistente fondo universitario en aquella cuenta bancaria que ahora pertenece a las familias engañadas vilmente por mi padre.

¿Qué haré ahora?

No me había parado a pensar en ello la última semana a pesar de haber iniciado mis ensayos para la audición de baile. Por unos momentos pienso que tal vez aún tengo oportunidad de inscribirme al examen de rendimiento que me permitiría obtener una media beca por lo menos, pero la misma razón que me orientó a arrancarle parte del cabello a una de mis contrincantes en aquel concurso, me guía a rechazar la idea de obtener parte de una beca que puede ser para alguien que realmente lo necesite.

Mi madre gana miles de dólares al mes, cuando son buenos meses para la moda, miles de dólares que invierte en prendas de diseñador y extravagancias, sin contar el fondo universitario que Jasmine tiene reposando en una cuenta bancaria a la espera de ser gastada.

Sé que de momento no tengo el apoyo de mi madre, menos si quisiera meterme con el dinero guardado para Jasmine, además de oponerse ella y Jasmine, también me opondría yo contra mi propia idea.

Never (#1)Where stories live. Discover now