Mikasa es una nueva estudiante junto con su hermano adoptivo y su mejor amigo en el instituto de Sina.
La joven no creía que un cambio de escuela fuera a ser de mucha importancia en su vida y que un simple chico engreído y odioso para ella le fuera...
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Narra Mikasa
Abrí mis ojos lentamente, estaba recostada, el techo era blanco y luminoso; toqué mi cabeza, aún la sentía adolorida pero ya no tan fuerte como antes; mire a mi derecha para toparme con una ventana y por fuera de esta una ciudad invadida en la madrugada. Volví a ver al frente y me encontré con Levi durmiendo en un sillón. Me levanté con el mínimo cuidado de no hacer ruido. Llevaba una bata del hospital; cerca de la camilla en un cajón estaba mi ropa; aún no podía cambiarme tal vez ni si quiera podía irme; salí de la habitación.
-Disculpe, podría decirme dónde está la recepción-. Pregunté a una enfermera que pasaba.
-Justo frente al elevador en planta baja, veo que estás hospitalizada ¿puedo ayudarte en algo?-.
-Si, quisiera ver al doctor que me atendió y saber si ya puedo irme-.
La amable enfermera revisó su papeleo -Eres de esta habitación verdad ¿cuál es tu nombre?-.
-Mikasa Ackerman-.
-Mikasa porque no me despertaste-. Dijo Levi saliendo de la habitación.
No le respondí, me quedé callada, me desmallé de la nada después de todo lo que Levi me dijo, estaba molesta con el por todo lo que hizo, todo el show que montó para que yo firmara ese estupido contrato matrimonial y lo que más me cabreaba era el hecho de que involucró a Eren y a Armin, el sabía que tan importantes son para mi, que aunque la sangre no nos une son mis hermanos y siempre me he encargado de protegerlos.
-¿Dónde puedo encontrar al doctor que me atendió?-. Pregunté de nuevo a la enfermera.
-En los documentos dice que ya tienes el alta, iré a buscar al doctor, el los verá adentro, mientras deberían entrar para preparar sus cosas-.
Volvimos a entrar a la habitación, Levi cerró la puerta y desde ese momento el ambiente ya se notaba tenso y pesado.
-Mika...-.
-Ire a vestirme antes de que el doctor llegue-. Lo interrumpí, tomé mi ropa y me dirigí al baño pero él tomó mi brazo impidiendome seguir.
-Se que estas molesta, lo dice tu rostro y la forma en como tratas de evitar el mayor contacto conmigo, te dejaré tranquila, no te hablaré si así lo deseas, solo dime si estás bien-. Me dijo, sentía su mirada fijamente hacía mi pero yo no hacía lo mismo, tenía razón estaba molesta y no quería hablar ni hacer algún contacto visual con el.
-Estoy bien, ya me puedes soltar-. Dije seca sin mirarlo.
Hizo caso y en cuanto me soltó me adentre en el baño para cambiarme. Aunque ya me había cambiado no salía del baño, era inocmodo y pesado que ahora Levi y yo estuviéramos en la misma habitación solos; lo que hizo no estuvo bien, al parecer tengo una historia de niños con él y aún tengo mis dudas si son ciertas, aún así no es justificable lo que hizo. Pasaron minutos y yo seguía sin salir del baño hasta que Levi tocó y dijo:
