Miradas Frías

Lejanía

-Si buscas a Mikasa...-. Hablo el castaño en cuanto quedo cerca del azabeche, sin embargo este último no lo dejo terminar.

-Ella no lo sabía, nunca le dijiste ¡¿No es verdad?!-. Levi lo tomó por el cuello de la camisa del chico reclamandole. -Ni si quiera intentes ocultarlo Eren, se lo que tu y tu familia le hicieron-.

En un principio Eren no supo que responder o como reaccionar ante el reclamo del azabeche, pero ahora estaba fastidiado y enojado, fastidiado que vinieran a restregarle en la cara como si el fuera el villano de la historia. Empujo a Levi separándolo.

-Tu y Mikasa terminaron, no te hagas su príncipe azul como si ahora ella te importara-.

-Dejate de bromas Eren, eso es asunto de ella y mío, y créeme me importa más de lo que crees-.

-Entonces podrías explicarme porque carajos se veía tan mal, ¡¿Qué fue lo que le hiciste!?-. El castaño con su mano soltó un pequeño empujón al costado de Levi. -Te hiciste ver como su héroe todo este tiempo solo por conveniencia ¿no? Pero solo jugaste con ella, para ti Mikasa solo fue un pasatiempo-. Suspiró burlándose y le dio otro empujón. -Eres bueno para mentir Levi, nose como pude tragarme tu cuento, al final resultaste ser un imbecil descarado, no quiero más problemas pero no tienes idea de lo tanto que deseo golpearte; pero no sirve de nada rebajarme a tu nivel madlito idiota, ¡eres un poco hombre que lo único que quería era acostarse con mi hermana!-. Un golpe interrumpió al de ojos esmeralda, haciendo que cayera al suelo.

-¡Eren!-. Llego corriendo Armin para ayudar a levantar a su amigo.

-Nose que tanta mierda hay en tu cabeza para sacar esas conclusiones, no fui el único imbecil que la hizo llorar, ¿es que ya se te olvidó o solo dices las cosas que te convienen?-. Hablo Levi mirándolo furioso.

-Entonces no niegas que la lastimaste-. Contesto Eren incorporándose aún en el suelo; soltó una risita burlona. -¿sabes? Ahora creo que el cara de caballo es mejor partido que tú-.

-Jodete-. Levi apretó sus puños, por un momento Levi había olvidado la razón por la que fue a buscar a Eren y ahora habían hecho una escena en la recepción del hotel; el chico se dio vuelta para marcharse, no tenía caso seguir hablando con Eren.

Mientras caminaba para salir del hotel, al bajar por el primer escalón de los pocos que habían en la entrada del hotel que dirigía hacía la calle. Pudo apenas percatarse del ataque que el castaño hizo; una vez que se levantó por el golpe que había recibido, corrió para alcanzarlo, se abalanzó contra el más bajo, y aunque el último se percató de eso, no pudo esquivarlo, haciendo que ambos rodarán por los escalones y terminaran tirados en la acera.

Conociendo al castaño, no podía quedarse de brazos cruzados después del golpe que Levi le había dado, no sería el único con heridas.

-¡Quién te crees para venir a golpearme y marcharte!-. Eren se levantó y aunque no fue más rápido que Levi, se acercó para golpearlo. Aunque Levi se movió, terminó aún así recibiendo el golpe y como respuesta a eso, golpeó igual al castaño para alejarlo.

El castaño era terco y aunque no fuese buen peleador eso no le permitiría rendirse tan fácil.

-Solo te aprovechaste de ella-. Camino nuevamente con paso rápido hacía Levi pateandolo de frente. En este acto Levi decidió aceptar el golpe haciéndolo retroceder por el impacto. Estaba fastidiado y no quería pelear con el chico, sería como pelear con un niño ya que él le superaba en fuerza y en parte sentía que merecía esos golpes, los sentía como un castigo por haber hecho llorar a la chica que ama. Sin embargo tampoco podía quedarse solo parado recibiendo los golpes del mocoso. Harto de la actitud de este, al ver como planeaba darle un puñetazo, Levi lo tomó del brazo, se dio vuelta y lo alzó para después estamparlo en el suelo.