Capítulo 10

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—A.... —Agus contaba el abecedario mentalmente.

—Basta —lo detuvo Cande.

—Tu —soltó Agus y me quedé viéndolo confundida.

—Agustín, podés por favor decir una letra de verdad y dejarte de pavadas —dijo Cande mientras se sacaba los lentes—. Ni siquiera hay palabras que empiecen con "tu".

—Por supuesto que hay —me miró.

—¿Ah, sí?, ¿cómo qué? —le contesté.

—Mmm, pues... como las actrices que para conseguir laburo se tienen que garchar al ex novio de la productora... —lo dijo en un tono broma y lo miré queriéndolo matar.

—Perdón, pero ¿me estás diciendo turra? —le contesté enojada, Cande se quedó boca abierta— Agustín, ¿por qué dices esas babosadas?, sabés que jamás me tiro a nadie —lo apunté con el dedo.

—Pues deberías —me contestó el desgraciado y le pegué en el hombro—. Lali, es que no entiendo porqué aceptaste el trato, no sos turra pero haces turradas a un nivel que...

—Bueno, a ver Agustín terminála —nos interrumpió Cande—. Lali, enserio, amiga.. que hayas aceptado ese trato de Eugenia para involucrarte con el ex y después mandarlo a la mierda... no es muy vos —contestó Cande mientras revolvía su té.

—Lo sé, pero no es para tanto —suspiré—. Vos sabes como son mis estrategias, nunca me involucro ni emocional ni sexualmente con nadie —Cande asintió—. Es otro trabajo más, solo que ahora tengo una recompensa mucho mejor que cinco mil pesos, voy a tener el trabajo soñado de mi vida —le hice puchero.
—Yo lo sé pero...
—Eugenia quiere regresar con este hombre, yo los ayudo a volver, yo gano mi protagónico de la serie y listo, todos felices —le fui explicando, Cande puso los ojos en blanco.

—Yo sólo te digo que ayer soñé que no tenías ojos... —soltó Cande y Agustín soltó una risa, yo la miré confundida.

—¿Perdón? —solté una risita.

—Eso quiere decir que no estás viendo lo que hacés, estás cegada por el éxito y está mal, amiga —explicó.

—Okay, ya sé por dónde querés ir. No lo estoy haciendo solo por dinero o el protagónico, lo estoy haciendo porque no tengo un trabajo digno, ya me cansé de no hacer más que teatro, quiero volver a hacer algo grande, me estanqué conmigo misma y al parecer mi carrera también. ¿Qué no ves que desde la película no hago nada grande? —le dije desanimada—. Llevo dos años sin hacer algo que realmente me guste y creo que es una señal que me haya llegado esta oportunidad y que además, le haya gustado mucho mi casting al propio director.

Cande y Agus me miraban sin saber qué responder, en el fondo ellos sabían que tenía razón, había pasado tanto tiempo haciendo algo que no me gustaba, lo hacía porque necesitaba dinero para mantenerme viva pero en realidad ya estaba harta de fingir. Aunque también yo sabía que no era la más grande idea involucrarme con Eugenia y aceptarlo cuándo me manipuló con mi carrera.

—Bueno y ¿ya tenés algún plan? —preguntó Cande regresándome de mis pensamientos.

—Sí. Eugenia me dio alguna data de su ex, tengo que ponerme a investigar mucho, porque al parecer es un hombre culto y bruto. Me dio un par de horarios que no sé como carajos sabe eso, para que finja que me lo topé en algún lado, también las placas y la marca de su coche, así que supongo que empezaré por ahí —terminamos la conversación sin ninguna excusa o regaño.

Me la pasé durante dos días investigando sobre coches, iba a todos los talleres cerca de casa para que me explicaran qué hacer cuando no funcionaba un coche o cómo cambiar una llanta. Ahí me enseñaron a desconectar y conectar el sistema de arranque sin problemas, ni perjudicar el motor.
Ya había armado un pequeño plan para poder conocerlo y hacer que cayera por mí de una, Eugenia me mantenía al tanto de sus movimientos, al igual que la serie, claramente no me daba información aún porque no era cien por ciento seguro que yo quedara, tenía que cumplir con esto a final de mes, la cual era la fecha límite para que ellos tuvieran al elenco completo y yo haya mandado a la mierda al ex de la mujer más popular de mi universidad. Genial.

A Mi ManeraWhere stories live. Discover now