Capítulo 12

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Cuando la tarde llegó, fue hora de que los megas y los bebés tomarán una siesta, las cortinas se bajaron una por una para darles privacidad. Los miembros de la familia en la sala se fueron de dos en tres y Cheng Xiu y el padre musculoso en la cama de al lado también se fueron uno tras otro.

Cheng Xiu pasó seis días en el hospital y sentía que olía a verduras en escabeche, por lo tanto, se apresuró a su casa para darse una ducha y cortarse el pelo. El musculoso papá trabajaba en un taller de reparación de automóviles y quería ganar dinero para mantener a su familia, por lo que solo se tomó medio día libre por la mañana y se fue después de dormir al bebé. He An y el pequeño omega de cara redonda no pudieron dormir, cada uno tomó un tazón de sopa de pollo con hueso negro que el padre musculoso había traído; estaban apoyados contra la cama para conversar.

He An le preguntó al pequeño omega de cara redonda como se había enamorado del padre musculoso. El omega, Yuan Lian, se rascó el cuero cabelludo, sonrió y le contó una historia de amor ordinaria y cálida.

Yuan Lian es un cocinero que dirige un pequeño restaurante en la calle para ganarse la vida. El restaurante es pequeño y se especializa en comida para llevar. Los platos son deliciosos y asequibles. El taller de reparación y mantenimiento de automóviles en el vecindario llama a su casa para pedir comida cada dos días, Yuan Lian era quien la llevaba. Si vienes y vas a entregar comida, la gente te reconoce fácilmente.

Un día, fue entregar comida al taller en una pequeña motoneta como de costumbre y fue el papá musculoso quien salió a recogerla, en realidad él no salía a recogerla a menudo y no estaba muy familiarizado con él.

El musculoso papá tomó la bolsa de plástico, entrecerró los ojos, torció sus gruesas cejas y abrió sus dos largas piernas para bloquear el camino del pequeño Yuan Lian.

-Estaba aterrorizado en ese momento. Le dije: amigo, no deberías golpearme. Puedes obtener un reembolso si la comida es desagradable. Como resultado... él...comenzó a felicitarme por mis buenas habilidades culinarias y metió docenas de dólares en mi bolsillo. Le daba vergüenza decir que es un hombre glotón y el gerente ordena solo la cantidad estándar cada vez. No podía comer lo suficiente ya que el dinero para el almuerzo es el mismo para todos, no pueden gastar en alimentos adicionales. Se vio obligado a venir a mí en privado para pedirme una cucharada de arroz extra para él...

Yuan Lian habló sobre el pasado con su Alfa y su corazón estaba lleno de felicidad.

Más tarde, las dos personas se pasaron su número de teléfono. Yuan Lian no solo sacaba una cucharada grande de arroz para el alfa todos los días, sino que incluso a veces le manda una nota con un puerquito en ella y le enviaba un pequeño mensajes de texto todos los días para preguntarle si estaba lleno. El alfa es uno de los hombres más rudos del condado. No es bueno con las palabras. Estaba tan emocionado por el cuidado de Yuan Lian, pero no podía confesárselo. Simplemente lo alababa por la deliciosa cocina.

Yuan Lian recargo la mano en su mejilla y se quejó

-No elogio mi ternura y mi buena personalidad. Solo sabe comer todo el tiempo... Es un estúpido...

Unos días después, la pequeña motoneta se descompuso. Se sentó a un lado de la carretera con frustración y llamó al alfa para pedirle ayuda. En dos minutos, el alfa, quien conducía una motocicleta, trajo una gran caja de herramientas. Desde entonces, Yuan Lian le agregó algunos ingredientes nuevos al almuerzo del alfa: medio huevo cocido, tres flores de brócoli y una zanahoria tallada en forma de corazón.

Al cuarto mes de conocerse, se acercaba el período de celo de Yuan Lian. Cuando llegó, su cuerpo estaba húmedo, caliente, flácido, era incapaz de mover el wok y tuvo que cerrar temporalmente el pequeño restaurante.

Perfect Match (ABO)Where stories live. Discover now