Perfect Match (ABO)

Capítulo 77

Zheng Feiluan lo entendió todo.

Este no es un síntoma de trastorno, sino un recuerdo.

Así como las olas, al volver, arrastran barro y arena, la fragancia de lirio de los valles trajo de regreso recuerdos. Ahora que se recuperaron sus gónadas, esos recuerdos, buenos y malos, volvieron con ellas.

He An estaba solo y frágil en su sueño, por lo que Zheng Feiluan lo abrazó firmemente y lo acompañó en la cama pensativo.

Toda la noche, Zheng Feiluan se sentó en la cabecera de la cama, dejando que He An durmiera a su lado. Al principio, el omega estaba extremadamente perturbado. En la parte posterior de su cuello, el dolor era severo y sus cejas siempre estaban fruncidas. Debido a que las dos feromonas se mataban entre sí en su cuerpo, en ocasiones sudaba frío y en otras caliente.

Mientras se recuperaba, los recuerdos tristes aparecieron, no solo eran recuerdos de su periodo de celo.

Los sentimientos de ser forzado a tener relaciones sexuales se convirtieron en un sueño que rompió el corazón de Zheng Feiluan. Escuchó a He An decir que no, decir que tenía miedo y dolor, se acurrucó lejos de él y se escondía en un rincón alejado de la cama del hospital, estaba desesperado por permanecer lejos de él, pero debido al frío y otras razones, debía volver humillantemente.

Zheng Feiluan estaba muy preocupado, por lo que tomó la mano de He An y soltó lentamente la feromona relajante.

Sabía que necesitaba esto.

He An se relajó casi de inmediato, sus cejas se estiraron, sus hombros se relajaron, se bañó en el olor de Zheng Feiluan y se durmió agarrando una esquina de su ropa.

Todo el mundo sabe que la feromona del alfa es el analgésico muy eficaz para los omegas, pero esa "eficacia" no es tan fácil de controlar. En un caso especial como He An, no tendrá efecto analgésico si se le da menos, y si se le da en exceso, estimulará las gónadas y agravará su dolor. Según el Dr. Ji, si Zheng Feiluan hace las cosas bien, He An sanará en tres días. Si no, no solo le llevará más tiempo, también dejará secuelas inestables.

Zheng Feiluan no se atrevió a descuidar nada ni por un minuto.

Se quedó mirando el rostro de He An, siempre prestando atención a los sutiles cambios de expresión. Cuando sudaba, se irritaba durante el sueño o tenía náuseas, liberaba más feromonas calmantes. Cuando notaba que le dolía su cuello, dejaba de liberar feromonas.

Esta sala estaba aislada y las enfermeras no podían entrar ni salir. Naturalmente, Zheng Feiluan se convirtió en la única enfermera. Cuando tenía sed, le daba de beber agua, y cuando tenía hambre, lo alimentaba con una solución nutritiva.

Estuvo ocupado toda la noche, el cielo brilla fuera de la ventana ahora.

Zheng Feiluan no había cerrado los ojos durante casi veinticuatro horas, pero no estaba cansado en absoluto, estaba sentado en el borde de la cama, mirando a He An, que dormía pacíficamente.

Originalmente se suponía que estas deudas debían pagarse algún día.

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He An estaba cansado y se sentía perezoso. Había dormido tan bien, fue una buena noche de sueño. Soñó que estaba en una tarde primaveral, el sol llenaba su cuerpo con el aroma a hierba recién cortada. Había olor de lirio de los valles y...otro olor tentador.

Cuando despertó, las cortinas estaban entreabiertas, la luz brillaba y una espesa nieve, como plumas de ganso, caía silenciosamente fuera de la ventana.