¡Tomalo o Dejalo! [Jenlisa g!p]

Capitulo 25

Conteniendo las lágrimas y poniendo cara de valiente, Jennie entró al pasillo con Rosé y les tomó una copa de vino. Cuando la música comenzó a sonar, Kai se acercó y le pidió un baile.

Dándole su copa a Rosé pensó por qué no, estaba aquí para divertirse y como Lisa no tuvo la decencia de presentarse, podría irse al infierno.

"Parece que has estado llorando, ¿es porque tu esposa no ha aparecido?"

"Mira, realmente no quiero hablarte de Lisa." Kai era la última persona con la que hablaría sobre Lisa.

"Entonces no volveré a mencionarla", dijo, acercándola mientras se movían con la música. Apoyó la cabeza contra la de ella. "Te ves increíble con este vestido, pero siempre te ves bien con cualquier cosa que te pongas".

Después de un par de bailes con Kai, se disculpó y fue a buscar otra copa de vino. Miró a todas las parejas felices bailando y la tristeza se apoderó de ella, deseando que Lisa estuviera aquí con ella. La gente seguía viniendo a hablar con ella. Algunos de los empleados que solían hablar de ella a sus espaldas ahora la estaban chupando. Como eran buenos en su trabajo, lo dejó pasar, al menos ahora le mostrarían más respeto.

Varias copas más de vino más tarde, y el hecho de que se hacía tarde decidió irse a casa, Lisa todavía no respondía a sus llamadas. Al decirle a Rosé que iba a llamar a un taxi e irse a casa, salió a hacer la llamada. Estaba borracha y tuvo problemas para marcar el número cuando alguien le arrebató el teléfono de la mano. "Oye, ¿qué diablos?" espetó, luego vio que era Kai.

"Creo que bebiste mucho, déjame llevarte a casa".

"Kai", dijo, mirándolo a través de una visión borrosa. "¿Me estás acosando?" preguntó, tapándose la boca y se rió.

Poniendo su brazo alrededor de su cintura, la acompañó hasta su coche, abrió la puerta y la ayudó a entrar antes de dar la vuelta a su lado y entrar. "¿A dónde quieres que te lleve? Si necesitas recuperar la sobriedad primero, puedes vuelve a la mía ".

"Soy una mujer casada, no puedo volver a tu casa pero tampoco quiero ir a casa y enfrentarme a ella. Llévame a un bar, quiero beber y bailar hasta que salga el sol".

"Por mucho que me gustaría, realmente creo que ya has tenido suficiente, ahora dime dónde vives".

Haciendo pucheros se cruzó de brazos. "Bien," espetó ella, dándole la dirección.

Entrando en el camino de entrada y estacionando su auto, sale, dando la vuelta al lado del pasajero, abrió la puerta y la ayudó a salir. Mientras ella se tambaleaba, él le rodeó la cintura con el brazo y la acompañó hasta la puerta principal.

"Gracias por traerme a casa."

Con su brazo todavía alrededor de ella, la apoya contra la puerta. Él la mira, tenía un fuerte impulso de besarla, de sentir sus labios una vez más y cuando él puso sus labios sobre los de ella, ella lo apartó.

"Kai, ¿qué diablos crees que estás haciendo? Soy una mujer casada y si Lisa te veía te mataría".

"Lo siento, pero te ves tan triste y sola. Tu esposa no te está tratando bien, puedo decirlo. Déjame besarte, déjame mostrarte cómo puedo tratarte mejor que a tu esposa. Fue bueno entre nosotros a la vez hasta que la cagué. Sólo sé que puede volver a ser bueno, dame una segunda oportunidad ".

"No, es mejor que te vayas ahora."

Su cabeza daba vueltas, se sentía bien saber que un hombre la deseaba, incluso si era por el mentiroso y engañoso Kai que le rompió el corazón. Pero no podía sacar a Lisa de su mente, a pesar de que la lastimó al no aparecer y tan enojada como estaba con ella, simplemente no podía dejar que Kai la besara. "Adiós, gracias por el paseo", dijo, abriendo la puerta y la cerró detrás de ella.