¡Tomalo o Dejalo! [Jenlisa g!p]

Capitulo 29

Lisa mira a Jennie. "Seguirán molestándonos hasta que hagamos lo que quieran", dijo, tendiéndole la mano a Jennie.

"Ustedes dos bailan maravillosamente juntas", dijo Jihyo, rompiendo el calor que se estaba acumulando entre ellas. "Vamos a tomar una copa antes de acostarnos".

Esa noche, cuando se puso el camisón que le dio Jihyo, tuvo que sonreír. Era un vestido de satén sexy que le sentaba perfectamente. Jennie se sorprendió de que la mujer mayor todavía usara unos como este y apostaba que ella y su esposo aún tenían una gran vida sexual.

Pero ahora Jennie tenía que meterse en la cama con su mujer que con una mirada o un toque de ella podía convertirla en una pila temblorosa de papilla. La forma en que los labios de Lisa hizo tocaron su cuello tan suavemente antes de que el fuego en su núcleo se elevara. Tenía que ser fuerte si quería evitar tener sexo con Lisa.

Lisa estaba de pie mirándose a sí misma en el espejo que llegaba hasta el suelo, no estaba acostumbrada a usar pijamas y pensó que se veía ridícula. Volvió la cabeza cuando escuchó a Jennie entrar al dormitorio y Jennie se echó a reír.

"Está bien, ¿qué es tan gracioso?" Preguntó Lisa, inclinando la cabeza hacia un lado mientras miraba a Jennie de arriba abajo. El camisón que llevaba se ajustaba a su cuerpo como un guante, mostrando sus curvas y la parte delantera era baja, lo que le daba a Lisa una vista de los increíbles senos de Jennie.

Jennie trató de no reír por lo que se tapó la boca, pero ya que Lisa preguntó. "Esos pantalones de pijama no te quedan bien, son demasiado grandes". Por supuesto, serían demasiado pequeños para ella, Kwangsoo era alto pero también delgado todavía tiene una figura masculina donde Lisa era más delgada, sus piernas fuertes y delgadas, pensó Jennie para sí misma. El solo hecho de pensar en las piernas de Lisa la excitó, podía sentir la humedad entre sus piernas cuando su coño comenzó a palpitar.

Gruñendo, Lisa los derribó, se los quitó y sin importarle que no tuviera nada debajo.

Jennie se mordió la lengua y tuvo que alejarse de Lisa. Mientras les lavaban la ropa y la ropa interior, Lisa estaba desnuda debajo de los pantalones del pijama. Metiéndose en la cama Jennie le dio la espalda a Lisa, dormir esta noche no iba a ser fácil para ella.

"Ahora esto está mejor", dijo Lisa mientras se metía en la cama junto a Jennie. Tumbada de espaldas, volvió la cabeza para mirar a Jennie. "Vaya, ese camisón que llevas puesto, hombre, te ves tan sexy con él. ¿Sabes qué se vería aún más sexy en ti?"

"¿Qué?" preguntó, dándole la espalda a Lisa.

Jennie sintió escalofríos cuando los dedos de Lisa, sintiéndose como una pluma cuando la tocaron ligeramente y sintió lo dura que estaba la polla de Lisa cuando se movió contra ella. Lisa le estaba haciendo difícil resistirse, lo que no daría por sentirlo dentro de ella, pero tenía que detenerla antes de que se rindiera a su lujuria animal.

"Mueve tu polla antes de que te la corte", espetó Jennie, sintiéndose sexualmente frustrada. Maldita sea por ser tan jodidamente caliente con una polla enorme, se dijo en silencio.

Lisa rápidamente retiró su mano y retrocedió, dándole la espalda a Jennie y se rió. "Sé que no harías eso, te gusta el placer que te da y sé que volverás a rogar por ello. Solo espero que no esperes demasiado, las duchas frías no son lo mío".

Lisa se despertó con el sol brillando a través de la ventana, aterrizando justo en sus ojos. Se protegió los ojos y miró y no vio a Jennie, su instinto le dijo que Jennie abrió deliberadamente las cortinas solo para meterse debajo de su piel, y estaba funcionando. Saltando de la cama y viendo su ropa tirada en la silla, se apresuró a tomar una ducha rápida.