MI LINDO AMIGO Kookmin

*17*

En la mañana siguiente de que los chicos llegarán al hotel, el pelinegro fue quien despertó primero. Pero grande fue su sorpresa al encontrar al lindo rubio, entre los brazos de alguien más.

Su pequeño cuerpo era cubierto por dos chicos. Estaba siendo abrazado por sus amigos. Había quedado en medio de los dos. Jungkook no sabía cómo fue que eso pasó, pero en su interior un cosquilleo lo comenzó a molestar. Su expresión denotaba enojo, tenso su mandíbula y quedó estático, mirando a los tres chicos.

Comenzó acercarse, necesitaba quitarle de encima a ese par. Los celos lo dominaban, no le importaba que fuera raro su comportamiento, tenía que hacerlo o terminaría gritando y golpeando a todos.
Fue entonces que el chico eye smile abrió sus pequeños ojitos, aún estaba somnoliento, solo logró dibujar una pequeña sonrisa y saludar al pelinegro.

Poco a poco fue incorporando se en la cama, se quitó de encima los brazos que lo sostenían, quedando sentado frotando su cara para despertar por completo. En ese momento a Jungkook se le olvidó su irá. Miraba a Jimin con tal admiración, "incluso cuando despierta, parece un ángel", se dijo a sí mismo.

—Te encuentras bien?.

—Um... Si. Buenos días Jimin.

El rubio le sonrió y se dispuso a levantarse. Tratando de no despertar a sus amigos.
Al lograr salir de la cama se incorporó a un lado del pelinegro.

—No sabía que dormían... así —cueationó Jeon.

—A qué te refieres... —trato de entenderlo—. O a eso. Si, digamos que Tae está acostumbrado a abrazarme, siempre lo hace cuando dormimos juntos.

—Cuando duermen juntos —a Jungkook se le hizo un nudo en la garganta—. No... Sabía.

—Si, es cuando nos quedamos en su casa o en la mía. Somos amigos desde la secundaria, él trata siempre de cuidarme.

—Ok —intentó contener su enfado.

—Ya dejen dormir...! —se quejo el peliazul, tapando su cara con las sábanas. Jimin sonrió apenado.

—Hora de levantarse —ordenó Jungkook.

—Cinco minutos más Kook.

—Como quieras. Solo levanta del suelo a Hobi.

Los tres miraron a un lado de la cama. Encontrando con la vista al castaño, quien dormía plácidamente en el piso del cuarto.

—Habrá pasado toda la noche ahí —sonó preocupado el rubio.

—No lo creo, tal vez se cayó hace poco.

—Oye Hobi despierta —el peliazul movió el cuerpo de su amigo, ganándose unos quejidos de su parte.

—Ay! Déjame...

—Levantate del suelo. Cómo fue que llegaste ahí.

—Yo... —se levanta—, pues... No lo sé, debieron empujarme cabezas huecas!.

—Pero si estabas en medio —cuestionó con obviedad el pelinegro.

—Pero ya saben que me muevo mucho y... —cortó sus palabras al mirar a la otra cama. Taehyung y Jin aún dormían, acurrucados uno al otro.

—Pero qué... —dijo confundido.

—Por qué se abrazan?! —gritó ahora el peliazul.

—Shh shh. No hables tan fuerte Namjoon —pidió el rubio—, los despertarás.

—Acaso son novios o qué —se volvió a quejar el castaño.

—No, ellos duermen así. Necesitan abrazar algo para sentirse cómodos. Normalmente es a un peluche.