𝐋𝐚 𝐬𝐨𝐦𝐛𝐫𝐚 𝐝𝐞 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫

Capitulo 29

Algunos docentes, se encontraba descansando y hablando en la sala de profesores. Entre ellos estaba Sinistra, Burbage, Sybill, Hooch, Sprout y Snape.

—Yo digo que se traían algo.—les susurro Sinistra a Hooch y Sprout.

—Solo estaban hablando, eso no nos dice nada.—hablo Rolanda, dándole un sorbo a su té.

—Además ellos se conocen desde años, Remus, era amigo de James, así que no dudaría que entre ellos haya una amistad.—le dijo Ponoma.

—Ayer estaban muy juntos, yo creo que tiene una relación. Charity, a de saber algo.—dijo Aurora observando a la mencionada.

—Sabes, que puedo sentir tu miraba, Aurora, si quieres preguntarme algo hazlo.—le dijo la profesora de estudio muggle dejando de escribir en su pergamino y observándola.

—Solo nos preguntábamos, si la profesora Potter, tiene una relación con el profesor Lupin.—soltó sin más Sinistra.

Snape, que estaba concentrado leyendo el profeta, no pudo seguir leyendo tranquilo, así que solo empezó a actuar que lo hacía; su concentración estaba en la platica de las profesoras.
¿Por qué insinuaba eso Aurora?.

—No.—respondió Burbage, rápidamente.—¿Que te hace creer eso?.—pregunto viéndola curiosa necesitaba sacarle información.

—Ayer en la noche Minerva, Filius y yo, los encontramos en el cuarto de servicio de Filch, estaban en una situación muy comprometedora.

—Si solo hablaban, te aseguro que no es una situación comprometedora.—contesto la rubia, sabía como era de chismosa la profesora.

—No solo hablan.—contesto Aurora con una sonrisa maliciosa.

Severus, ya estaba casi arrugando su periódico, parecía que iba a explotar y lanzarle una maldicion a la primera persona que abriera la puerta.

La sangre le hervía, completamente, no sabía que demonios hacía su Potter, con él idiota de Lupin, en el cuarto de servicios, estaban solos, en la noche, solos, él y ella, maldita sea solos.
¡¡Mierda!!, ¿por que le importaba tanto?. Potter no era nada para él, no existía, era una mocosa con sonrisa bonita que no importaba.

—Entones ¿que hacían?.—pregunto Charity.

—La profesora está...

—Buenas tardes, saben donde se encuentran la profesora McGonagall.—interrumpió el lobito entrando a la sala de juntas.

—¡¡NOOOO!!.—le grito él ojos negros fuertemente. Todos en la sala lo voltearon a ver algo asustados.

—¡¡Severus!!.—exclamó Charity muy sorprendida y preocupada.

El pocionista estaba rojo de la ira, con la respiración agitada de la furia que estaba conteniendo, la vena del cuello ya se le podía notar estaba palpitando. Le lanzaba a Lupin, una miraba que demostraba que lo estaba asesinando.

—Gracias, Severus.—dijo Remusito algo confundió por su reacción.—Con permiso.—se despidió cordialmente.

—Profesor Lupin.—le habló la rubia.—McGonagall, salió al pueblo, me imagino que no tarda en llegar.—le comento.

—Muchas gracias.—dijo Remus, haciendo una inclinación con su cabeza y dándole una sonrisa.

En la oficina del director, la profesora de historia de la magia, se encontraba sentada enfrente del escritorio del director.
Albus, la había mandado a llamar para pedirle un favor (cosa rara de él), la chica solo veía como el director se llevaba otro dulce de limón a la boca y no le decía nada.