𝐋𝐚 𝐬𝐨𝐦𝐛𝐫𝐚 𝐝𝐞 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫

Capitulo 25

N/A: Antes que nada Feliz Navidad súper tarde😂.
Se me hizo mas largo el capítulo así que habrá continuación en unos minutos.

Severus llegó a su sala, con una poción y un ungüento era lo necesario para curar la pierna de la chica.
Estaba confundido. ¿Por que demonios quería ayudarla? y para empezar ¿por qué la trajo a su casa?.

—Cúrate.—ordenó Severus entregándole las cosas y sentándose a lado de la joven.

—Eres muy mandón.

________, observó su pierna no dejaba de sangrar, tenía que pararlo, pero cual era el hechizo para hacer eso.
Se maldecía mil veces ella lo había estudiando pero ahora no se acordaba, era un echo morirá desagrada.

—Eres pésima.—exclamó Severus viendo como Potter solo miraba su pierna sin hacer nada.

—Estoy pensando, cuál era el hechizo, para parar esto.—dijo mientras señalaba la sangre.

—Tenías que ser Potter, no te sabes ni un simple hechizo.

—Discúlpeme, señor Perfecto que se acuerda de todos los hechizos.

—Ay, no se porque me metí en esto.—suspiro cansado mientras atraía una silla.
Que colocó enfrente de ________. Ahí tomó asiento.—Dame tu pierna.—ordenó.

—¿Que?.

—Acaso eres sorda.

—No, pero yo no pienso subir mi pierna a las tuyas.

—Bueno, sigue desangrándote, pero tendrá que ser afuera de mi casa, porque aquí ya has manchado mucho mi alfombra.

Jess dio un suspiro y hizo lo que le pidió Snape, subió su pierna a las de él.

Snape agarró la pierna de la chica y rápidamente con un hechizo no verbal hizo que la sangre se detuviera, después empezó a limpiar la sangre seca que se encontraba en la zona, tenía que hacerlo para observar mejor la herida.
El pocionista analizó la herida y vio que era algo profunda pero no tanto para que con un hechizo se curara sin ningún dolor alguno ya que con la poción selladora ardía bastante, pero como Potter ya había ensuciado bastante su alfombra de sangre. Era necesario usar la poción.

—¿Eso va a doler?.—pregunto al ver que el Snape iba a colocar la poción.

—No.

Snape, agregó la poción en la cortaba de la joven, ni un segundo pasó cuando se oyó un gran grito.

—No que no dolía.—exclamó con los ojos cristalizados, apretando fuertemente su muslo.

—No es dolor, es ardor, son cosas muy diferentes.—respondió serio, aunque por dentro le dada gracia al ver la cara de sufrimiento que hacía _________.

El profesor estaba esperando que la poción acabara de sellar toda la cortaba, mientras aguantaba los quejidos de dolor de la chica.
Severito poso su miraba en los muslo de la joven bruja, ella se veían tan bien apretándolos; estos estaban muy bien pronunciados era Perfecto para su boca, amaría llevárselos a ella y morderlos fuertemente.
El pocionista al imaginarse que él tocaba los suaves muslo de la joven y los mordía empezó a sentir que algo en él estaba empezado a dar cosquilleo, enseguida quito la mirada.
Sus ojos se fueron rápido al rostro de _______, sabía que no lo excitaría ver su sufrimiento, gran error la bruja tenía los ojos cerrados mientras mordía su labio inferior de una manera excitante (según Snape). Severus amaría ver ese gesto cuando él estuviera arriba de ella dándole placer.

—Ya dejó de doler.—dijo _______ sacando a Severus de sus pensamientos.

El dolor había terminado, porque la herida estaba completamente sellada.
En su lugar había quedado  una gran raya roja, que con el ungüento que tenía preparado desaparecería, rápidamente.