"Los siete años que pases aquí como residente de cirugía serán los mejores y los peores de tu vida."
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Eleanora Amedeo es la pasante de primer año más joven en adornar los pasillos del Seattle Grace. Demasiad...
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S8 EP21
Eleanorarespira hondo, saltando de un pie a otro mientras está parada en el muelle de la ambulancia, los otros residentes de su clase despidiéndose o subiendo al autobús que los llevaría al aeropuerto.
"Estarás bien." Max le dijo a su hermana, sosteniendo su bolso por ella mientras tenía su pequeño ataque de nervios. "Hiciste lo mismo justo antes de tu SAT, y luego de tu MCAT. Eres una verdadera genio, Ella. Puedes hacerlo."
"Puedo hacerlo." Respondió Ella, asintiendo con la cabeza. Entonces miró a su hermano pequeño y procedió a enloquecer. "¡Oh, Dios, no puedo hacer esto!"
Los ojos de Max se abrieron de par en par cuando Eleanora se pegó a su hermano pequeño, agarrándose a él con fuerza. Le dio una palmadita en la espalda, con sus ojos muy abiertos moviéndose alrededor.
Se posaron en Mark, que se acercaba con Avery a su lado, rondando como un padre preocupado.
"¡Mark!" Max siseó, llamando la atención del hombre. "¡Agarra a tu mujer antes de que me corte el suministro de aire!"
"Bien, de acuerdo." Mark exhaló, volviéndose hacia Jackson por última vez. "Ahora, ten salmón para cenar. Y dile al servicio de habitaciones que se asegure de que no esté congelado. Pierdes Omega-3 si está congelado. Avery, yo también tengo una esposa a la que consolar, ¿me estás escuchando?"
"Estoy tratando de no hacerlo." Le dice a Mark, enviándole una sonrisa. Mark suspira, sacando un fajo de billetes de su bolsillo.
"Muy bien, ¿cómo estás de efectivo? Me imaginé que necesitabas algo." Jackson levanta las cejas y lo toma, asintiendo mientras se dirige al autobús.
Mark se dirige entonces directamente a su mujer, apartándola de Max. "Nora, mírame."
"¡¿Y si fracaso, Mark?! No puedo... ¡no puedo fallar! Me va mal fracasar, y perdería toda la credibilidad que tengo y....y..."
"Respira." Mark le dice suavemente, instándola a inhalar y exhalar profundamente. Al cabo de unos instantes, le acaricia las mejillas, haciendo que lo mire.
"Eres la mujer más inteligente que conozco, y eres una de las mejores residentes que ha visto este hospital. Tienes tus fichas, las cinco rondas, tienes un libro de texto, tienes dinero y tienes tu cerebro. Eso es todo lo que necesitas, muñeca."
"Eso es todo lo que necesito." Exhaló, asintiendo con la cabeza. "Todo lo que necesito son mis fichas."
Después de un momento, sus ojos se abren de nuevo, con voz de pánico. "¡¿Y mi pin?! Oh Dios, ¡no tengo a George!"
"Lo empaqué para ti." Le dijo con calma, Eleanora se calmó al saberlo. "Está en la bolsa con tu maquillaje. Lo tienes, Eleanora Amedeo-Sloan. Ahora, dame un beso y ve a patear traseros."
