Mini historias Boku no hero [+18] TERMINADA

Shinso como papá

Nota de escritora: Estoy haciendo pedidos que me llegan por privado antes de terminar esta hermosa travesía. Ya saben que pueden seguirme por Twitter (se los dejo siempre abajo) o pasarse por mis dos historias que estar en curso. Se recomiendo leer mini historia de Shinso antes de leer este especial.
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POV T/N

- ¿No prefieres otro gato?- pregunté evadiendo la petición de Shinso. Llevábamos dos años de casados y teníamos una vida tranquila con cuatro gatos.

- Quiero un bebé.- dijo cruzándose de brazos como un niño caprichoso. Yo solté un suspiro mientras miraba a través de la ventana.- No quiero obligarte, solo te estoy diciendo lo que quiero porque tú me preguntaste.

Yo tenía muchas dudas, también quería un bebé. Sobre todo con mi esposo y bien sabía que él sería un excelente padre.

De lo que no estaba 100% segura era de que yo podía ser una buena madre. Fui criada por una cultura diferente y ahora me estaba acostumbrando aún a otra por lo que tenía mucho miedo de cometer errores.

- Pensándolo bien, olvídalo.- dijo Shinso con una sonrisa tomando mis manos.- Si no quieres un bebé está bien por mi, mañana iremos por otro gato y listo, se me pasará.

- ¿Seguro?- pregunté, no sabía porque me sentía culpable aunque sabía que esa no era su intención.

Shinso llevaba mucho tiempo extraño, pensé que se estaba alejando de mi o que ya no me sentía cariño, pero la idea quedaba a un lado cuando seguía siendo el mismo de siempre después.

Por momentos lo encontraba en su celular viendo videos de cómo cuidar un bebé o consejos de expertos para hacerlo. En cuanto me veía guardaba todo y sonreía nervioso.

Los últimos días los había pasado en la academia donde anteriormente su sensei Aizawa daba clase, ayudaba a los alumnos que estaban por convertirse en heroes. También ayudaba a Eri a estudiar en las tardes o a entrenar.

Se veía tan atento con los niños, se llevaba muy bien con ellos y sabía cómo llevar la situación.

Mientras yo era un desastre.

Los pocos niños que estaban bajo mi cuidado siempre terminaban llorando y yo no sabía por qué. ¿Tan fea era?

Una vez mi madre me dijo que los niños podían sentir cuando una persona estaba nerviosa o tenía miedo. Pues al parecer si, porque siempre cargaba a los niños con miedo de que se me cayeran.

Volviendo al presente miraba a Shinso con unas ganas desastrosas de llorar. Tenía tanto miedo de que se cansara de mi indecisión. En cuanto él noto como se me humedecían los ojos comenzó a desesperarse y preocuparse.

- Vez por eso no debí de habértelo dicho.- dijo abrazándome con fuerza.- Lo siento, no te presiones en serio. Ni siquiera me gustan los niños, deberías de saberlo. Solo no llores...

Mientras hablaba más me hacía llorar. Yo si quería tener un bebé, quería cuidarlo junto con él y que seamos felices, pero no sabía cómo alejar este miedo de mi.

- Yo si quiero tener un bebé.- dije en medio del abrazo y Shinso se separó de golpe.- Pero tengo miedo...

- ¿De qué amor?- preguntó mientras me abrazaba ahora acostándose en el sillón, yo sobre él.

- De no ser la madre perfecta que un bebé necesita.- respondí mientras él acariciaba mi cabello para calmarme. Sabía muy bien que eso me ayudaba.

- Amor...- levante la mirada hacia él.- Soy un hombre de muy pocas palabras y muy honesto así que te dire la verdad. Eres una mujer increíble, si no lo fueras no me hubiera casado contigo, así que serás una excelente madre. Quizás no la más perfecta ante los demás, pero si lo serás para mi y para nuestro hijo. No te angusties sobre lo que pasará o no, aún no lo sabemos hasta que lo vivamos.