⊶56⊷

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Su corazón intentaba escapar por su garganta, o al menos eso es lo que estaba sintiendo. Todos los ojos estaban en él, y no por su cabello rubio. Inconscientemente se subió el cuello de la camisa de por sí alto. Subió al ascensor y el alfa que ya estaba dentro salió despavorido.

Los alfas tenían miedo de que los deltas les trataran como ellos tratan a los omegas, por eso les veían como depravados sexuales.

- Gracias por acogerme de nuevo- el gran jefe le sonrió.

- Siento mucho la confusión de aquel momento, quiero asegurarme de que quede claro que una vez todo se aclaró, recuperó el trabajo de inmediato. Su orientación sexual es un tema privado que no concierne a su rendimiento, bonito cabello por cierto- Seokjin hizo una reverencia y se dirigió a su puesto.

Quizás uno pensaría que ahora lo normal sería tener un sentimiento de liberación, mas él solo deseaba en silencio que su intimidad nunca hubiera sido dominio público. No tenían el derecho de tratarle así cuando él había sido forzado a confesar.

Los omegas que usualmente le miraban anhelantes, cuchicheaban cuando pasaban a su lado como si fuera un extraño espécimen, los betas y los alfas le veían como un ser inferior. Un alfa que no era capaz de dominar y buscaba ser sometido, ¿eso era un delta marcado?

- Buenos días, jefe Min- le entregó su café, Yoongi siempre tomaba un café a esa hora. El menor aceptó el vaso, cuando sus dedos se rozaron por accidente, se retrajo haciendo que la bebida se derramara por la mesa. Quedaron en un incómodo silencio- Jefe Min- el alfa bajó la cabeza culpable- Le traeré otro.

- No hace falta, debemos ponernos al día- Seokjin agarró entonces una libreta, listo para apuntar datos específicos y no olvidarse de nada que hubiera ocurrido en su ausencia. 

Esperó y esperó, hasta que levantó la cabeza queriendo saber por qué no empezaba de una vez. El alfa se había quedado absorto en su cuello, ¿tratando de ver las marcas a través de la tela?

Era mejor arrancar la espina del tirón.

- Jefe si no puede trabajar conmigo, dígamelo directamente- Min se mordió el labio avergonzado.

- Es raro- se sinceró- Es como si no te conociera... ¿Has salido con más alfas de la empresa?- las orejas del secretario se sonrojaron.

- No, no lo he hecho. Se que es un comportamiento poco profesional mi relación con el jefe Kim, sobre todo teniendo en cuenta que técnicamente somos rivales, pero surgió de forma natural. Trato de mantener la mayor distancia posible entre el trabajo y mis relaciones.

- ¿Y por qué?- se paró a sí mismo, buscando las palabras exactas- ¿Por qué no pareces un delta?

- ¿Cómo sería un delta para usted?- Seokjin tenía experiencia, bastaba un conversación para desmontar los comentarios homofóbicos.

- No lo sé... no así- el mayor cruzó las piernas y se desabotonó los primeros botones de la camisa, sacó su pendiente del bolsillo y se lo puso.

- ¿Así es suficiente cariño?- tomó su maletín agarrando un pequeño estuche y resaltó el maquillaje discreto que se ponía cada mañana, finalizando con un poco de colonia. Estando ésta contenida en un frasquito rosa- Puedo ponerme un par de tacones y un vestido si eso ayuda, no sería la primera vez- y por lo que había descubierto sobre su novio, quizás lo haría más veces- Sin embargo, mi apariencia y mi forma de hablar seguirá siendo independiente de mi orientación. No te vas a convertir en un delta si te maquillo aquí mismo, incluso si me besas por error, no lo serás. No hay nada que "te haga delta".

- Entiendo- Yoongi se sentía atacado, tragó duro y asintió.

- Bien- Namjoon llamó a la puerta.

- Señor Min, el gran jefe quiere hacer una junta para agilizar el reintegro- alzó las cejas notando el ligero cambio de imagen de su novio- ...¿Todo en orden?

- Vamos- el jefe Min se levantó seguido por su secretario, reuniéndose en el pasillo con el equipo Daegu. El trayecto en ascensor fue de apenas unos segundos, mas Seokjin fue perfectamente capaz de alistarse de nuevo "formal". No era exactamente un gran espacio, Taehyung tuvo que aplastarse contra una de las esquinas para que pudiera rehacer su sombra de ojos.

- Déjate el pendiente- le aconsejó su pareja completamente de forma desinteresada, nótese el sarcasmo.

- Calla- las puertas se abrieron, el jefe de marketing les esperaba con una sonrisa falsa y artificial. Los que fueron testigos de sus comentarios intentando que despidieran al delta le fulminaron al instante.

- Me gustaría hablar con el secretario Kim Seokjin un momento- el mencionado accedió sin pensarlo dos veces. Gente constantemente le pedía "una charla" porque Yoongi era un tanto inaccesible y aterrador, a diferencia de su educado secretario abierto a consultas. Era bien sabido que los altos cargos respetaban sus opiniones y que influenciaba de forma significativa las decisiones del vicepresidente Min, por eso, cuando llegó a Mingyu la noticia de que había vuelto, un sudor frío caló su espalda.

> Verá, puede que haya hecho anteriormente comentarios gravemente desacertados. Querría disculparme de corazón, por eso, ¡le he enviado una invitación a un show que demostrará mi sinceridad!- el delta encendió su teléfono confundido, no teniendo ni idea de lo que estaba diciendo.

La "Casita Feliz" buscaba que sus instalaciones fueran modernas, había pantallas grandes en cada sala de reunión que se conectaba de manera sencilla a los teléfonos. Kim, debido a que siempre se reunía en la misma, es decir, la más cercana al despacho principal, usaba mucho esa función y la tenía predeterminada.

En resumen, cuando le dio click al anuncio del show, un video de strippers alfas surgió en la gran pantalla por error. Primero, asustando a los que estaban en la junta, segundo, no sabiendo como reaccionar al notar que era Seokjin quien les estaba compartiendo eso. ¿Esto era algún tipo de reivindicación delta?

- ¿¡CÓMO SE QUITA ESTO!?- el delta entró en pánico- ¡Se ha congelado la imagen!- Mingyu igualmente le daba a desconectar repetidamente sin éxito, imaginando ya su despido inminente.

- ¡Hay que desconectar la pantalla grande!- corrieron a la oficina. Mientras el secretario apagaba el televisor, el jefe de marketing literalmente la desconectó de la fuente de corriente.

- ¡Me ha intentando sobornar con alfas en tanga!- le denunció al gran jefe histérico- ¡Ha sido culpa suya!

- ¡Se llama estrategia de marketing!- se defendió- ¿¡Permitimos que un pervertido al que le gusta someterse sigua en su puesto pero yo no puedo hacerle una invitación subida de tono!?- Seokjin le pateó la entrepierna.

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Secretary Kim, look at me! [Namjin]Where stories live. Discover now