Juegos Mentales [Libro #1] ✓

CAPITULO 9

TAYLOR

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Entro a mi departamento y todos entran detrás de mi menos Scarlett que se queda afuera hablando por teléfono con alguien.

—¡Mama!—grito y mi madre sale de la cocina con una gran sonrisa.

—Por fin llegaron, ya quería conocerlos— se aserca a los locos con una sonrisa.

Saluda a cada uno y se presenta menos a Will que ya lo conocia desde hace años y ya que el fue la mayor razón para venir a España. Cada quien se acomoda en los muebles y sillones después de saludar.

—Es un placer conocerla, Vivían— dice Maikol.

—Lo mismo digo. Es un placer conocer a los amigos de Taylor.

—Pues para nosotros es un placer conocerla— le sonríe Alisson.

—Gracias cariño—se gira hacia mi que me quedo recostado del marco de la puerta.

—Bien hijo y ¿que paso con la chica que me ibas a presentar hoy?— todos me ven con una sonrisa.

—Esta hablando por teléfono.

—Ya la quiero conocer. Quiero saber quién amenazo a la vecina.

—¿Amenazo a la vecina?—pregunta Owen en tono curioso.

—Si, la chica me llegó casi llorando diciendo que una chica que decía ser la novia de Taylor la amenazo con desfigurarle el rostro.

—Si seguía intentando ligar conmigo— explicó y todos se empiezan a reír.

—Eso es normal en mi hermana— dice Owen y mi madre lo ve sin entender.

—¿Tu hermana..?—pregunta y se escucha como se cierra la puerta del departamento.

—Señora— entra uno de mis hombres mirando a mi madre y a mi— señor nos acaban de informar que la zona está rodeada con muchos hombres armados rodeando la zona y al parecer están cuidado a alguien.

—¿A quien?

—A nosotros— dice Owen.

—Ni que ustedes fueran tan importantes para cargar tantos escoltas— me burló.

Oigo un golpe seco detrás de mi y al girarme veo a uno de mis hombres apuntarle a Scarlett en la cabeza.

—Baja la perra arma si no quieres que te arranque los ojos imbécil— pide Scarlett con las manos levantadas y en una de ellas su móvil.

—No puedo.

—Baja el arma Carlos— exijo.

—Señor no sabe quien es ella— dice mi hombre de alta confianza.

—Que bajes el arma.

—Nos acaban de dar la confirmación de quienes son ellos señor— hace referencia a los locos.

—¿Quienes son?— enarco una ceja.

—Traela hasta acá— pide mi madre con referencia a Scarlett.

Hago señas hacia la sala y Scarlett camina hacia ella sin decir nada y se para a unos metros de mi madre.

—No...no puede ser— murmura viendo a la chica a mi lado de arriba a abajo.

—Es un placer volver a verte Vivían—no ahí una sonrisa cariñosa si no una torcida.

—Bajen las armas y que guarden la calma— pide mi madre de golpe hacia mis hombres.

—Pero señora...

—Es una orden— asienten y se retiran— ¿Que carajos haces tú aquí?— me mira— ¿dónde la conociste?