Capítulo 21

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Jimin estaba disfrutando de una jugosa sopa de tomates, con toda la grasa demon que lo hizo sentir cálido por dentro. Aquí no había basculas o quien sabe, tal vez en los puestos de salud tenían, pero aun sin ese aparato, esta semana había sentido que aumento algo de peso. Su madre Yu parecía pensar lo contrario, porque estaba a su lado, lista con otra cucharada de sopa, esperando que acabara el contenido actual.

-Creo que ya tuve suficiente- El Omega apartó disimuladamente su plato, provocando que la postura de la mujer se encorvara.

-Vas a dejar la barrera por un largo rato, tu colita no será suficiente para mantenerte cálido- De pronto su padre se apresuró a la mesa, con un termo ovalado para resguardar y mantener la temperatura de un alimento.

-Si nuestro hijo lo necesita, podrá tomar más en el camino- Jimin estaba enternecido por la preocupación de sus padres, que prepararon juntos más bocadillos para el viaje.

Agradeciendo a la pareja, que le dieron un ligero abrazo y lo encomendaron con la Dama de la niebla, el aún pequeño Líder Omega se dispuso a subir hacia la puerta. Jungkook pasaría por él, ya que Yoongi tuvo que encargarse de algo a última hora.

Mientras subía las escaleras se topó con Hana, al parecer bajaba a desayunar también con su equipaje al hombro. –Hey Líder, Jungkook ya llego, pero espere.

-Por supuesto- Jimin murmuro sabiendo muy bien, que estaban a punto de contarle algo interesante.

-También llego Bra, al parecer está muy enojado con Namjoon- La Alfa tenía un tono de voz casi imperceptible, siempre cuando te contaba algo era como escuchar el arrullo del viento. Era casi místico para temas tan banales.

-¿Escuchaste lo que le dijo?- El Omega se había vuelto un ávido oyente de la mujer, por lo que ella se había vuelto casi su espía personal.

-Se fueron hacia el cuarto de Namjoon, obviamente no quieren que nadie los escuche- Maldición, Jimin pensó que eso lo hacía aún más sospechoso, por lo que sería un crimen perderse tan jugosa conversación.

-¿Por qué no lo seguiste?- El Omega estaba azotando su colita molesto, a lo que Hana bajo la mirada como si la estuvieran reprendiendo.

-Falta poco para partir, y no he comido nada porque dormí más de lo que debía- Apenada, a la Alfa le rugió el estómago y todo.

-Toma, puedes quedarte con todo, pero ve a escucharlos- Dándole la sopa, con los otros variados bocadillos, que podrían alimentarla por tres días, Jimin la incito a volver por sus pasos.

-Oh bueno...no puedo desobedecer al Líder Omega- Con maestría la mujer acomodo la comida en su bolso; luego tomo un gran sorbo de sopa, al mismo tiempo que iba a cumplir la petición de Jimin.

El ex terrícola necesitaba más información, quería de una vez por todas desvelar del lado de que bando estaba Namjoon. -¿Qué harás si termina apoyando a Bra?

-Tengo un clan en el que pensar, si ellos son una amenaza a esa estabilidad, cumpliré con mi papel de Líder, aunque vaya en contra de mis sentimientos- El ex terrícola pensó en todas las penurias que habían enfrentado los habitantes de esta ciudad, como personas como sus padres o Lidus renunciaron a sus sueños, por mantener en pie la comunidad.

No iba a permitir que un sádico como Bra, por avaricia condenara a tantos inocentes, y si Namjoon no podía ver eso, pues la elección era simple.

Ante ese pensamiento, otro extraño recuerdo ajeno a él lo asalto. Podía ver la figura imponente de un Leopardo, que debía ser un Líder Omega por ser un hombre con el pelaje blanco, en vez de gris. Su mirada azul parecía moverse inquieta por todas partes, vigilando su entorno a cada paso. El crujido de la nieve crispo al Leopardo, y de entre los arboles apareció una persona de casi 2 metros de altura.

Me convertí en un cambia-forma Omega al ir a otro mundo /Jimin/Y.GxN.JxJ.KDonde viven las historias. Descúbrelo ahora