Me convertí en un cambia-forma Omega al ir a otro mundo /Jimin/Y.GxN.JxJ.K

Capítulo 32

Un día de viaje pasó sin inconvenientes, y aún con el volumen de la caravana, lograron llegar a la zona de descanso a tiempo. Hana estaba feliz, ya que estaba junto al fuego con una comida contundente y fragante, un lujo que había extrañado los últimos días.

Sorbió media olla de estofado sin pestañear, y luego se echó junto a la fogata satisfecha. Era una minina feliz, olvidando el hecho que le ardían las garras, por la marca que le hizo a Namjoon. Aunque era una buena señal, el dolor le indicaba que estaba cerca...tal vez demasiado.

Miró sin mucho compromiso a su alrededor, hasta que se topó por accidente con unos pequeños y muy negros ojos, de parte de un pequeño erizo, arropado por una pomposa cola, con todas sus púas llenas de la pelusilla del pelaje...que Jimin nunca peinaba. Mantuvo una expresión seria, mientras veía al pequeño intruso hacerse una especie de cueva en tanta pelusa, para esconderse de nuevo.

-¿Le estas mirando la cola a mi Omega?- Yoongi hablo repentinamente, asustando a la hembra que se encogió por instinto.

-No empecemos- Mascullo indignada, pero muy placida para molestarse en discutir.

Jimin ignoro ese intercambio vergonzoso, porque lo único en su mente era ir a dormir después de la comida. Pero la suerte no estaba de su lado, porque al borde del campamento, donde los últimos vestigios de luz contorneaban las siluetas de los árboles, se encontraba Vi, dedicándole una mirada pesada y firme, llamándolo tácitamente.

-¿Deberíamos ir?- Busco consejos de su guía...quien ya estaba roncando pesadamente en su cabeza. -¿Enserio?

Zarandeó al gatote espiritual, que maulló para disuadirlo, hasta que se vio obligado a despertar. –Vamos a dormir.

-Yo también quiero, pero tengo curiosidad, no me ha dirigido la palabra en todo el trayecto- Lo más seguro es que fueran solo problemas, sin embargo, no era bueno dejar a los enemigos acampar a sus anchas.

-No seamos idiotas, hazle una seña a nuestros Alfas, y que él vea que lo hiciste, para que no se le ocurra hacerse el valiente.

-Mira esto es un acontecimiento para celebrar, ya llevabas un buen rato sin anotar una buena- Totalmente indignado, el Leopardo le mostro los colmillos y crispo el lomo...tan amenazante y lindo.

Mirando atrás al campamento, se encontró con la gran mayoría de personas pasando el rato amenamente, con los únicos cachorros persiguiéndose mutuamente, alrededor de sus padres, quienes si habían hecho su trabajo de recolectar información cultural...no como él, que no hizo nada más allá de lo que le pidieron.

Por la Dama, como lo estresaba no dar la talla en este puesto. Suspirando por amor tan patéticamente ¿Cómo tendría la confianza del Clan con esta pobre actuación?

-Pero cumplimos nuestros deberes, siento que lo hicimos bien- El guía creía que gracias a la confianza que trasmitió su humano como líder, las negociaciones volvieron a ser suaves y amigables. El poder que exudaba el Omega le daba estatus al clan...sin embargo Jimin no podía dejar de pensar que eso no era obra suya, no podía recibir merito por solo existir.

Tratando de no sentir lastima por sí mismo, echo esos pensamientos al fondo de su mente, y se acercó a Jungkook.

El Alfa se encontraba sumergido en la libreta militar que usaba, la cual estaba llena de símbolos que solo el guerrero podía entender, porque este apenas tenía los conocimientos básicos de escritura, aunque de forma milagrosa, sabía contar y sobre la aritmética, lo que era suficiente para los informes de campo. Para el ex terrícola era difícil precisar si esto era inconveniente, para cualquier otro del equipo que quisiera leer las notas del jefe o, por el contrario, una maravillosa estrategia contra el espionaje.