capítulo 28

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Me gustas.

Les recomiendo que escuchen la canción High enough de K.Flay, yo te diré cuando escucharla y te la dejaré acá para que no te cueste buscarla.

Jazmín

Al terminar la última clase del día, doy gracias a Dios porqué mañana es sábado y todos iremos a la feria ¿Me pregunto si Ethan querrá ir? Porqué me gustaría que fuera.

Se que por fuera Ethan se ve con cara de pocos amigos y que su mirada da miedo pero por dentro el es una persona que te sabe escuchar, ¡Sólo que algo bipolar el joven! Y si él es así.

Pero no lo culpó por ser así, aunque suene estúpido me atrae con locura, me tiene bien pillada, es cómo si mi otra yo se sintiera a gusto con él.

Pero se que de toda aquella seguridad qué me trasmite también se qué puedo salir lastimada, qué las llamas de su infierno pueden quemarme pero de algo estoy segura qué al darle la potestad que me destruya sería todo un privilegio y no me arrepentiría de nada.

Al salir del campus lo veo, esta con una camiseta blanca, una chaqueta de cuero negra y sus vaqueros desgastados del mismo color de su chaqueta; su espalda está recostada en su motocicleta.

El levanta la mirada y choca con la mía, siento que con sus ojos grises puede ver hasta lo profundo de mi alma, al llegar cerca de él una sonrisa lobuna surca en la esquina de sus labios.

-¿Lista?- dice mientras me extiende un casco -Te prometo que no te vas a arrepentir.

-Eso esperó- digo extendiendo mis manos para recibir el casco.

El sube primero y luego me subo yo, -Esto es una mala idea, ya me arrepentí- digo en mi mente; enciende la motocicleta y acelera sin caminar haciendo que la motocicleta se levanté un poco.

Del mismo susto me aferre a el cómo un Koala, mis brazos se enroscaron más a su cuerpo, lo escuchó soltar una carcajada -¡No me digas qué te dio miedo!- dice riendo mientras me ve de soslayo.

-¡Grandísimo idiota!- digo soltándome de mi agarre para golpearle el hombro -¡Casi me sacas el Cristo de la boca!.

El se ríe como si le causará gracia lo que le digo -¡Eres tan dramática, Jazmín!- dice y por primera vez no dice mi nombre con desdén como aquella vez en el restaurante.

¡Hasta suena mejor viniendo de sus labios!.

Arranca la motocicleta y salimos a toda velocidad de la universidad, me aferró a el cómo si mi vida dependiera de eso ya qué nunca me había subido a una motocicleta ya qué tengo miedo de caerme y reiniciarme el Windows.

Ethan se adentra por una calles hasta que llega en una especie como zona natural como una colina por así decirlo, subimos y llegamos hasta el final de ese lugar.

Al llegar Ethan apaga la motocicleta, baja de ella y me ayuda a bajar -¡Te aferraste a mi como un gatito!- dice quitándome el casco.

Siento mis mejillas tornarse rojas de vergüenza ya que es verdad -Lo siento- digo sin mirarle.

El posa su mano en mi mejilla y luego baja a mi mentón dónde lo eleva y hace que lo vea -A mi no me molestó en lo absoluto, es más... -dice acercándose más a mí su rostro queda a milímetros del mío -Me gusta que hagas eso- la palabras no salen de mi boca y el lo nota porqué estampa sus labios con los míos en un beso, su mano viaja hasta mi cintura y me jala hacia el mientras que su otra mano se posa en mi nuca; muerde mi labio inferior haciendo que entreabra mi boca y en un segundo su lengua entra sin pedir permiso.

Peligrosa Obsesión: Por Siempre Mía ©. ✔Terminada (Libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora