CAPÍTULO 6

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BELLA Y BESTIA




Faye abrió tanto la boca de la sorpresa que se casi se le caía el cacho de pan que estaba masticando somnolienta. Estaba desalmorzando (ya saben: desayuno y almuerzo juntos) en el comedor junto a Tamlin y Lucien de lo más normal ahí cuando entró Feyre. Eso le quitó de golpe el sueño. Fue verle el moretón en el cuello y pensar:

¡Pero qué bestialidad! ¡Esa rubia se ha pasado tres pueblos! ¡Qué salvajada ha hecho ese weón de mierda!

-Buenas tardes-Saludó Feyre con falsa alegría, dedicando una sonrisa artificial al Alto Lord.

Él parpadeó, mirándole, y los dos inmortales murmuraron unos saludos mientras Feyre se sentaba frente a Lucien y no frente a Tamlin, como hacía siempre.

-Pareces... recuperada-Lucien se atrevió a hablar primero, echando una mirada a Tamlin-¿Has dormido bien?

-Como un bebé-Le sonrió mientras comía.

Lucien le dio una miradita a la hermana con la que mejor se llevaba. Esta alzó las cejas y se encogió de hombros. La actitud de Feyre le parecía tan rara como al pelirrojo.

-¿Qué es ese golpe?-Preguntó al reparar en el moretón de Feyre.

Ella señaló a Tamlin con el tenedor.

-Preguntádselo a él. Él me lo hizo.

La mirada de Lucien pasó de Tamlin a Feyre y después volvió a hacerlo en sentido inverso.

-¿Por qué le hiciste un moretón en el cuello a Feyre?-Preguntó con un tono verdaderamente divertido.

Faye también se reiría si no pareciera que Tamlin había intentado despedazar el cuello de su pequeña hermana. Le dio un golpe a Lucien en el brazo mientras lo fulminaba con la mirada. Este solo se encogió de hombros sin borrar su sonrisa.

-La mordí-Dijo Tamlin calmadamente sin dejar de cortar la carne-Nos encontramos en el pasillo después del rito. Diría que esta humana tiene el deseo de morir. Si Feyre no consigue obedecer las órdenes que le doy, no soy responsable de las consecuencias.

Ambas hermanas se tensaron como una cuerda, pero solo una estalló:

-¿Responsable? ¡Me acorralaste en el pasillo como haría un lobo con un conejo!

Lucien puso un codo sobre la mesa y se cubrió la boca con la mano; tenía el ojo púrpura muy brillante. Faye lo miraba con censura, pero él seguía ahí, riéndose. Resopló con fastidio al ver que seguiría con esa actitud de Michael Jackson comiendo palomitas de maíz.

-Aunque tal vez no haya sido yo. Lucien y yo, los dos, te dijimos que te quedaras en tu habitación-Dijo Tamlin con tanta calma que daba ganas de tirarse del pelo.

-¡Eres un cerdo, inmortal!-Gritó, y Lucien aulló y casi se cayó de la silla.

«¡Eh! Te he enseñado mejores insultos que ese, mi hermana. Dile a ese hijoputa de su recomepinguera madre que, si te vuelve a tocar un solo pelo, le vas a arrancar los testículos con una cuchara y se los harás tragar»

Los hombres presentes la observaron boquiabiertos, con temor. Feyre sonrió malvada en dirección de Tamlin. Él seguía con su máscara de calma, pero por dentro temía por sus pelotas.

-Lo que Faye ha dicho. Me vuelves a tocar así y te juro que desearás que te arranque los testículos con una cuchara y te los haga tragar-Fue su última advertencia antes de salir del comedor.

A COURT OF SILENT AND STARS (UNA CORTE DE SILENCIO Y ESTRELLAS)Where stories live. Discover now