A COURT OF SILENT AND STARS (UNA CORTE DE SILENCIO Y ESTRELLAS)

PRÓLOGO

UN MONSTRUO

Lucien había regresado de uno de tantos viajes. Al ser el emisario de la Corte Primavera no podía estar mucho tiempo en la misma. Faye lo extrañaba, aunque se dijera a sí misma que era por las apuestas en las partidas de cartas y los juegos de mesa.

Fue a recibirlo dispuesta a compartir con él la broma que se le ocurrió gastarle a Tamlin y Feyre. Sonreía ampliamente cuando divisó a su amigo pelirrojo. Una chica rubia se le acercaba demasiado y él parecía querer que la tierra lo tragara. Entonces Lucien la vio y corrió en su dirección con una gran sonrisa. Para su sorpresa, la elevó en el aire, dándole una vuelta antes de volverla a bajar.

-Hola, amor. Te he extrañado.

Si fue extraño que le llamara "amor", más extraño aún fue que acortara la distancia entre ellos, besándola.

Error de Windows-fue todo lo que pudo pensar de la sorpresa.

No lo empujó lejos de ella. Él solito se separó dedicándole una cálida sonrisa que le puso los pelos de punta. Casi parecía estar enamorado. Si no fuera porque su ojo rojizo la miraba con desesperación, casi se hubiera creído que estaba apendejado.

-Ianthe, te presento a mi novia. Faye, ella es una vieja amiga de Tamlin.

Entonces entendió. Aquella desesperación era una súplica para que le siguiera el juego. Entrelazó un brazo con el de Lucien y le sonrió a la chica rubia.

"Querida Nesta:"

Arrugó el papel en una bola y lo tiró al otro lado de la habitación.

"¡Hola, Nesta!

¡Soy un elfo! (/:v/)"

Volvió el papel una bola arrugada y también lo tiró por encima de su hombro sin muchos miramientos.

"Hola, Nesta :

¿Sabes? Tamlin y Feyre se casarán en un mes. ¿No es eso loco? Y hablando de locuras... ¿Sabes quién más está de novia con un inmortal? Pus esta pieza de arte."

A ese papel le reparó el mismo destino que a los demás.

"Hola, Nesta:

El mundo se encuentra en un cambio constante. Los objetos cambian y las personas también. Y yo he cambiado para bien o para mal. He evolucionado al igual que la humanidad a partir de los changos."

Detuvo su mano, vacilante sobre si desecharlo o no; pero al final volvió el papel una bola arrugada y lo arrojó al otro lado de la habitación.

"Hey, Nesta, Elain:

Las extraño muchísimo. También a papá y a Severus. Espero que él haya encontrado a su Lily."

Sonrió con nostalgia. Alzó su mano y dejó que la magia fluyera. Se trataba de un glamour sencillo que Lucien le había enseñado.

El papel se movió como si en cualquier momento se fuera a ir volando por el viento. Después empezó a doblarse sobre sí mismo como a un origami. Cuando por fin tuvo una forma consistente, la hoja se convirtió en plumas. Delante de Faye había una pequeña paloma blanca, una paloma mensajera.