Después de pasar unos maravillosos días en la hacienda la familia decidió volver a casa el domingo por la tarde, Mayte y Manuel habían pasado los mejores días de su vida después de París, pero como todo lo bueno tiene su final les había tocado volver a la realidad, Mayte estaba muy entusiasmada porque el lunes iba a volver a trabajar y Manuel estaba feliz de verla así, sabía lo mucho que había soñado con volver a levantar su empresa y ahora era una realidad.
Manuel: Estoy seguro que te va a ir muy bien con tus nuevos clientes -Sonrió mientras la veía.
Mayte: Me siento como principiante -Sonrió mientras jugaba con sus manos.
Manuel: Lo vas a hacer muy bien como siempre -Le aseguró. Ya casi llegamos a casa -Dijo mientras checaba el camino.
Mayte: Me muero de ganas de ver a mi nana -Le dijo mientras le bajaba a la música.
Manuel: Yo también la extrañé -Sonrió.
Mayte: Me agrada que se lleven tan bien -Lo miró.
Manuel: A mí también -Asintió. Ella me defiende de todo el maltrato que me hacen -Se rió.
Mayte: Ay si! Pobrecito -Se rió también. Cómo está Emmanuel? -Le preguntó.
Manuel: Bien, hablamos esta mañana y me dió las novedades de cómo va todo en la ferretera -Le contó.
Mayte: Y que tal? -Le preguntó.
Manuel: Todo bien, nos está yendo muy bien y él está bien -Respondió. Y que tal Fer? -Le preguntó.
Mayte: Muy bien -Le contó. Está bastante ocupada con eso de que quiere abrir su tienda física, no sabes el éxito que es su página -Sonrió.
Manuel: Oye, que bueno -Sonrió. La verdad es que es buenísima en lo que hace -Dijo sinceramente.
Mayte: Si, lo es -Asintió. Este proyecto es todo para ella y siempre se ha esforzado muchísimo para lograr todo lo que ha hecho -Le dijo.
Manuel: En eso se parecen mucho -Sonrió mientras tomaba su mano y la acariciaba.
Manuel siguió su camino mientras seguían platicando y unos 20 minutos más tarde por fin llegaron a casa, en cuanto entraron Nora los recibió con mucho cariño y les dió un abrazo a cada uno, sin duda los había extrañado.
Nora: Mis niños -Sonrió. Que bueno tenerlos de regreso -Los miró.
Manuel: Nosotros también la extrañabamos, nana -Sonrió.
Mayte: Que tal la pasaste? -Le preguntó.
Nora: Bien -Respondió. Estuve descansando y de vez en cuando ayudando a Juana con algunas cosas de la casa -Le contó.
Manuel: Usted no para -Negó.
Mayte: Mi nana es imposible -Le dijo.
Nora: No me sé estar quieta -Sonrió.
Unos minutos después llegaron los demás y Gerardo ayudó a Renata a bajar la única maleta de ropa que se había llevado a la hacienda, por más que habían tratado de animarla aún estaba triste por lo que había pasado y le iba a costar reponerse de ese golpe.
Ágata: Bienvenida, hija -Le sonrió. Aquí vas a estar segura -Acarició su espalda.
Gerardo: Cualquier cosa que necesites ver con la policía me dices y te acompaño -La miró.
Renata: Gracias -Asintió. Mañana tengo que ir a hablar con el comandante para tener el informe de todo lo que sucedió -Suspiró.
Manuel: Espero que te sientas cómoda -Dijo sinceramente.
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Solo tú
FanfictionFuiste tú quien calmó el desastre cuando todo estaba perdido, me abrazaste y se juntaron mis pedazos partidos, fui yo quién salvó tu corazón del vacío y lo llenó de ese sentimiento inesperado llamado amor.