Capítulo 45

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Pasaron alrededor de 10 minutos y Manuel sintió que el alma le regresaba al cuerpo cuando vió a la enfermera qué se había llevado a Mayte acercarse a él, estaba muy nervioso y sentía un hueco en el estómago, enseguida la mujer lo tranquilizó y le pidió que la acompañara a la habitación en la que tenían a Mayte, le informó que su esposa ya había despertado y que se encontraba bien, el se sintió más tranquilo pero no iba a estarlo por completo hasta que supiera que era lo que estaba pasando o que era lo que estaba provocando todo esos malestares en su esposa.

Enfermera: Es por aquí -Dijo mientras abría la puerta de la habitación.

Manuel: Mi amor -Dijo mientras corría a su lado.

Mayte: Amor -Sonrió levemente. No sé qué me pasó -Dijo mientras lo veía.

Manuel: No te preocupes, la enfermera me dijo que ya te sacaron sangre para hacer los análisis y pronto lo sabremos -Acarició su cabello.

Mayte: Que ha pasado con mi nana? -Le preguntó.

Manuel: No lo sé, el doctor no ha salido a decir nada aún -Le respondió.

Mayte: Necesito levantarme de esta cama para cuando ella despierte -Dijo preocupada.

Enfermera: Yo le aseguro que así será, señora -Le dijo sinceramente. En cuanto tengamos los resultados de sus análisis, podrá irse -Sonrió amablemente.

Manuel: Ya ves -Dijo mientras besaba su mano. Ahora quiero que estés tranquila, ya no te preocupes por favor -Le pidió.

Mayte: Está bien -Asintió. Voy a estar tranquila hasta que nos den los resultados porque de nada sirve que me esté preocupando -Lo miró.

La enfermera se despidió y les hizo saber que volvería dentro de 20 minutos con los resultados de los análisis, Manuel le estuvo haciendo cariñitos para tratar de distraerla y que no se preocupara o pusiera nerviosa, Mayte se sintió afortunada por tenerlo y terminó olvidando el mal rato mientras se reía de sus malos chistes.

Después del tiempo acordado la enfermera volvió junto con el doctor y ya traían los resultados de los análisis listos, sin duda el resultado era motivo de felicidad y no de preocupación, todos los malestares eran causados por un buen motivo y el doctor estaba seguro que la pareja se iba a poner muy feliz.

Mayte: Te amo, mi amor -Dijo entre risas.

Manuel: Y yo a ti -Dijo mientras besaba sus labios.

Enfermera: Perdón que los interrumpa -Dijo mientras entraba a la habitación.

Doctor: Buenos días -Los saludó con una gran sonrisa.

Mayte: Buen día, doctor -Lo saludó.

Manuel: Buenos días -Dijo amablemente. Ya están listos los resultados de mi esposa? -Preguntó.

Doctor: Así es -Asintió. Aquí los traigo -Dijo mientras alzaba un folder.

Enfermera: Les dije que no tardaban nada en estar -Sonrió.

Mayte: Que es lo que tengo, doctor? -Le preguntó mientras se sentaba en la camilla.

Manuel: Está todo bien? -Preguntó mientras tomaba la mano de Mayte.

Doctor: Más que bien diría yo -Asintió mientras los veía. Cómo te había dicho tenía dos diagnósticos respecto a tus malestares, pero quería comprobarlo y acerté al que más me latía -Sonrió.

Mayte: Y? -Preguntó bastante nerviosa. Cuál es el diagnóstico? -Suspiró.

Doctor: Permítanme felicitarlos, señores Mijares -Sonrió ampliamente. Van a ser padres, estás embarazada Mayte -Dijo mientras les daba el folder con el resultado que decía "Positivo" en mayúsculas.

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