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Ambos bajaron las escaleras llegando al comedor, en donde ya se encontraba la mayoría de los Weasley a excepción del señor Weasley y Percy.

Una vez que Draco piso este lugar, sintió el calor de la cocina, señal de que la cena estaba recién hecha.

Todos estaban hablando entre ellos. Hermione y Ron hablando con Ginny, bueno, era más Hermione y Ginny, Ron de vez en cuando hablaba para reprochar. Los gemelos, Fred y George hablaban entre ellos, probablemente tramando algo. Molly hablaba con Tonks enseñandole la comida, probablemente dándole la receta del pollo con naranja que había hecho. Y Sirius y Remus se susurraban en sus oídos riendose.

Harry llegó al lado de él agarrándole la mano de inmediato, Draco lo miro y este le dio una sonrisa cálida.

Luego, Harry lo guiaba hasta la cocina, donde estaba Molly.

—Quisiera presentarte con la señora Weasley—dijo y se detuvo para mirarlo—, si quieres.

Se notaba la importancia que tenía la señora Weasley en la vida de Harry, y Draco lo entendía.

—Claro—dijo.

El pelinegro sonrió aún más y lo guió.

—... y volteas el pollo después de 15 minutos, para que se cocine de la misma manera—decía la señora Weasley a Tonks mientras la chica asentía con la cabeza.

Con la presencia de estos dos, ambas voltearon a verlos.

—Hola de nuevo, primito—dijo sonriente Tonks.

Draco saludo con un movimiento de su cabeza.

—Eh, señora Weasley—dijo Harry—, bueno, ya sé que, si, lo... conoces por nombre—se notaba su nerviosismo al hablar y en la sonrisa con una leve mueca—. Bueno, él es Draco Malfoy, mi novio.

Por un momento pensó que había salido mal porque solo un segundo de silencio parecía una hora de silencio lleno de incomodidad. Afortunadamente no fue así.

—Un gusto, señora Weasley—dijo Draco extendiendo su mano de manera elegante, sin ser brusco—, Harry me ha hablado mucho de usted.

Molly sonrió y extendió su mano siendo agarrada por el rubio y luego este la besó como usualmente su padre lo hace.

—Uh, que amable—dijo ella—. El gusto es mío Draco. Y por favor, ten la confianza de decirme Molly. Harry y Ron me han hablado bien de ti.

Tanto Harry como Draco se sorprendieron por lo mencionado que se vieron entre si para confirmar solo con su mirada si habían escuchado bien.

—¿En serio? —preguntó Draco.

—Claro, ambos me dicen lo feliz que haces a Harry. Estoy feliz de haberte al fin conocido, Draco. ¿Te gusta el pollo a la naranja? ¿O pollo con naranja? ¿Cómo lo conoces?

—De ambas maneras está bien—dijo—, me gusta, muchas gracias.

—Bueno, vayan a sentarse. Ya.

Y eso hicieron. Todos estaban tan cómodos que no notaron cuando Harry le robó un beso rápido a Draco.

***

El día siguiente, todo era normal, Draco había dormido en la habitación solo, en donde la cama era si, grande, pero era del mismo tamaño que la cama de su mansión, por lo que no le encontré problema alguno, aunque si debe de admitir que le hubiera gustado compartirla con Harry.

La comida fue sencilla, spaguetti rojo seguido de un bistec de res con papas. Molly Weasley a pesar de todo nunca dejaba a las personas sin hambre, era algo de lo que ella estaba orgullosa. Al terminar la comida, Draco observó como Tonks se acercó a Harry de manera no tan discreta pareciendo discreta y le entrego algo susurrándole algo. Quería pasar eso por alto, pero no soportó ni un minuto cuándo ya quería saber que había pasado.

Catching FeelingsWhere stories live. Discover now