36.

712 82 21
                                    

Se metió a lo que parecía una gran piscina y sintió el agua bastante cómoda para él, caliente pero tampoco para que puedan cocinarlo, con burbujas de diferentes colores.

Decidió poder relajarse por esa noche, solo había escuchado a todos los Gryffindor hablar y hablar y tenía tantas cosas en la mente como para poder disfrutar de un momento así.

Y llegó la voz de Hermione a su mente reclamándole que tenía que averiguar lo de el huevo, por lo que rodó los ojos al pensarlo y agarró el huevo, para poder hacer algo de lo que seguramente se arrepentirá después. Lo abrió y el horrible sonido que siempre emitía salió otra vez, por lo que lo cerró y gruñó.

—Yo lo metería en el agua.

Se sobresaltó al escuchar la voz de Myrtle la Llorona, quien estaba asomándose de un excusado sonriéndole.

—M-Myrtle—dijo Harry—, ¡estoy desnudo!

—Oh tranquilo—dijo después de soltar una de sus risas molestas—, cerré los ojos.

No pudo evitar sentirse incómodo al ver a la fantasma mirándolo. Se acomodó un poco tapándose con las burbujas como si sirviera de algo.

—¿Dijiste que metiera el huevo al agua?

—Mhm, o al menos eso es lo que hizo el otro chico—salió del excusado flotando de un lugar a otro—, ese apuesto, chico, Cedric.

—Si, ya—gruñó.

—Mmm, ya no me haa ido a visitar al baño, ¿a caso ya no te intereso? —preguntó ella poniéndose al lado de la figura de la sirena tratando de imitarla torpemente.

—No he tenido tiempo—dijo Harry—. Entonces Cedric lo metió al agua.

Myrtle asintió.

—Y no solo hizo eso, le encanta hablar solo. Hablaba de un chico que decía que le gusta, y al hablar de ese tal chico rubio que decía pues... jugó con su propia varita.

La fantasma se empezó a carcajear y Harry se sintió aún más incómodo que antes pero tambien furioso si es lo que pensaba.

Agarró el huevo y sin dudarlo dos veces, lo metio al agua, en donde lo abrio para ver que sacaba su brillo usual pero bo escuchaba nada.

—También mete tu cabeza, tontito.

Y lo hizo, se metió al agua, en donde pudo escuchar con claridad lo que decía el huevo:

Donde nuestras voces suenan, ven a buscarnos,
que sobre la tierra no se oyen nuestros cantos.
Y estas palabras medita mientras tanto,

pues son importantes, ¡no sabes cuánto!:
Nos hemos llevado lo que más valoras,
y para encontrarlo tienes una hora.
Pasado este tiempo ¡negras perspectivas!
demasiado tarde, ya no habrá salida.

¿Pero qué significa eso?

Tras pasar casi una hora en ese baño descrifrando todo, lo cuál fue bastante fácil que le sorprendió, se fue a dormir, el llegar fue otra cosa, se encontró con Ojo Loco, Filch, Snape, afortunadamente solo Ojo Loco supo que estaba ahí gracias a la capa de su padre, pero se quedó con el mapa del merodeador, no le milestaba que lo tuviera, al fin y al cabo Dumbledore confiaba en él.

Como era Sábado, pudo dormirse bastante cómodo y sin necesidad de saber que tenía tareas pendientes, bueno, si las tenía, pero no eran para el día siguiente.

Se levantó de su cama, estirando su mano para agarrar sus lentes y ver bien. Ya había salido el sol y al parecer Ron y Neville ya no estaban en sus camas, lo supo porque la de Ron estaba sin él acostado y la de Neville ya tendida, pero quienes si estaban eran Dean y Seamus, ellos estaban en la cama de Seamus acostados agarrados de las manos y de seguro hablando de algo.

Catching FeelingsWhere stories live. Discover now