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En su momento no le tomo el peso que se debía cuando dijo el apellido Malfoy en la entrevista con Rita, al fin y al cabo no creía que la bruja hiciera de las suyas, pero así fue.

Una vez que leyó lo que insinuaba Rita no escuchaba nada, no veía nada más que las letras rojas MALFOY y cómo insinuaba que Draco se acercó a él por mera estrategia para derrotarlo.

"... y por sorpresa de muchos el joven campeón menciono el apellido MALFOY. Recordemos que esta prestigiosa familia se deslindo de los actos de la primer guerra mágica. Ahora, su heredero, Draco L. Malfoy es la pareja de Harry Potter.

¿A caso el joven de los Malfoy se acercó a Harry para derrotarlo desde un inicio y el pobre no se ha dado cuenta?

Sea cuál sea el caso, el salvador Harry James Potter no tiene miedo en decir nombres ni en poner frente a..."

Draco fue su primer pensamiento. No estará nada feliz, y sin duda Harry tampoco lo esta.

Mientras Hermione y Ron veían las cartas con emoción de la aprobación de muchas personas y Umbridge llegaba a paso apresurado hacia su lugar con su sonrisa forzada, Harry levantó la vista hacia la mesa de los Slytherin y no vio a Draco, al buscarlo por el lugar pudo ver su espalda y su cabello saliendo del Gran Comedor. No le importó los halagos ni el que Unbridge llegaba ni le gritó, corrió hacia fuera para alcanzar a Draco.

El rubio andaba de paso apresurado con la cabeza en alto y la mandibula apretada, cuando escucho pasos corriendo detrás de él sabía que se trataba de alguien, no sabia si de Theo, Pansy, Blaise o el mismo Harry, ni quería voltear.

-Déjame en paz-dijo seco.

-Draco, por favor, déjame explicar-escuchó la voz de Harry.

Con solo escuchar su voz Draco quizo voltear a pedirle esa explicación, quería saber por qué. Pero su orgullo le ganaba, por lo que siguió caminando con su decisión en mente y sus ojos cristalizados por tratar de no mostrar emoción alguna.

Antes era fácil, pero una vez que se junto con Harry, ocultar sus emociones era cada vez más difícil, sobre todo si se trataba de él.

-No te quiero ver, Potter.

-Escúchame entonces.

-Escucharte es lo último que quiero.

-Draco, ya conoces a Rita, cada cosa que dice uno la puede alterar.

-No, no se, porque tu eres el famoso Potter. Gracias por eso.

Cada vez que le decía Potter le dolía. Le recordaba en sus primeros años cuando se peleaban, le recordaba al viejo Draco, no es que lo odiara, pero le cuesta más llegar a él, pero, siempre llega.

Los alumnos en los pasillos esta an confundidos, ya tenía mucbo tiempo que Harry y Draco no se peleaban, y empezaron a analizar que en tres días no se hablaban y ahora se gritan por los pasillos.

-Draco, no dije nada malo de ti, en serio.

-¿Por qué creerte, Potter?

Sabía que debía creerle, lo hacía, pero estaba cegado. Todavia no se hablaban desde que lo dejó al lado en San Valentin y ahora esto.

Sabe que su familia esta involucrada, no tiene problema con que se mencione eso, es verdad; Draco por lo menos no estaba involucrado; el hecho de que Harry haya dicho el apellido y se ponga en duda la lealtad del slytherin hacia este y que no se negara le dolía. De por si mucha gente ya miraba a los Slytherin de manera peculiar por el escape de los prisioneros, ahora con esto, el reflector para villano andaba en Draco.

Catching FeelingsWhere stories live. Discover now