21. Juntas Otra Vez

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CALLE.

Tomé a poché de las piernas y la hice sentar encima de mi, comencé a besar su cuello, nos separamos y no había necesidad de decir alguna palabras, solo con nuestras miradas, sabíamos cuánto nos deseábamos, le quite su blusa y sólo se quedó en sujetador, me mordi el labio y baje mis besos, mis labios se dirigieron a su seno izquierdo, lo bese sobre la tela del sujetador y en un hábil movimiento lo desabroche, cayó en algún lugar de la sala.

Calle: no sabes qué hermosa vista tengo, desearía tener esta vista siempre.

Poché: mmm pues a mi también me gustaría tener una vista así.

Tomó los bordes de mi blusa y la lanzó al suelo, y sin ningún rodeo, desabrocho mi sujetador y también lo tiro a algún lugar, tomó mis pechos en cada mano y les daba leves masajes, y con su pulgar hacia círculos en mi pezon y eso me exitaba más, nos volvimos a besar.

Calle: quieres... que... siga?

Poché: si... hazme, hazme...          el amor... pero... vamos a mi... habitación.

Calle: Claro... pero dejame... decirte... que ya me diste... luz verde, no hay vuelta atrás mi amor.

Nos pusimos de pie, y cuando poché iba a caminar, le di la vuelta y la carge, rodeo mi cintura con sus piernas y subíamos las escaleras besándonos, cuando llegamos a su habitación se bajó para abrir la puerta y entramos, cerré la puerta de una patada y la guíe a su cama, le quite sus jeans y la deje solo en bragas y baje hasta llegar a su vagina, se notaba lo mojada de estaban sus bragas y las baje poco a poco, cuando estuvo completamente desnuda ante mi, me levante y le di un leve empujón para que cayera en su cama, me subi sobre ella y comenzamos a besarnos.

Calle: te haré el amor, hasta que no puedas mas, extrañe tanto mi amor.

Baje mis besos por el valle de entre sus senos y dirigí mis labios a su seno derecho y le daba leves mordidas, escuchaba como poché gemia muy bajito.

Calle: hey... no te... contengas... quiero, quiero... escucharte.

Poché: ah, ah, Calle... deja deja... de hablar, y hazme tuya.

Después de varios besos y caricias, baje mi mano a su centro y le estimulaba su clitoris que para estos momentos ya estaba muy inchado y solo pensarlo, perdía la cabeza, así que sin ningún rodeo introduje mis dedos en su centro, y le daba embestidas suaves, ver la carita de poché me hacía quererle hacer el amor todo el día y a toda hora.

Poché: ma... más rápido calle...

Movía mis dedos muy rápido y sentía como estaba apuntó de llegar a su orgasmo, así que aproveche y como nuestra primera vez, subí un poco y tome su pezon entre mis dientes y le daba pequeñas mordidas, hasta que sentí como se vino.

POCHÉ...

Después de tener un orgasmo tan  placentero, Calle soltó mi pezon y sacó sus dedos de mi interior, y los llevó directo a su boca para chuparlos, luego de eso me beso para que yo también probará mis propios jugos, el beso se intensifico muy rápido y calle ya estaba estimulando mi clitoris de nuevo, así que en un hábil movimiento le di la vuelta y esta vez yo estaba sobre ella, y como lo hizo ella, le daba besos en su cuello y deje una que otra mordida que de seguro dejara marca, baje mis besos a su abdomen y porfin llegue al botón de su pantalón, que la instante lo desabroche y de un solo tiron la deje sin nada, me mordi el labio y sin ningún rodeo lleve mis labios a su centro y comencé a besarlo, introduje mi lengua y sentí como calle me tomaba del cabello y hacia que no me pudiera separar de su centro, levante la cabeza y la mire.

Calle: per... perdón... ahh, ahh es... es que... me deje llevar, no quise... incomodarte.

No le conteste y subí para besarla, y con el beso demostrarle que no me incómodo, la tomé de ambas manos y las subí sobre su cabeza, trato de soltarse pero no la deje, encaje nuestros centros a la perfección y comencé a frotarlos, nuestros jugos se mezclaban, solté sus manos y ella las llevó a mi espalda, con mis labios recorría todo su cuerpo, llegué a su oreja y le di una mordida en su lóbulo, y le susurre.

Poché: estas lista?

Calle: ahh, ahh si... solo ve... despacio.

No sabía porque tenía que ir despacio pero como dijo ella voy a ir despacio, introduje dos dedos en calle y sentía lo apretada que estaba, deje un tiempo mis dedos sin moverlos.

Poché: estas bien, quieres que siga?

Calle: joder... ahh ahh, sigue.

Comence a mover mis dedos, dejando que se acostumbrara y con paso del tiempo me dijo que fuera más rápido.
Nuestros cuerpos estaban sudados, Calle ya había tenía muchos orgasmos, pero eso no los detenía, ella me hizo suya muchas veces, hasta que no pudimos más y caímos rendidas en la cama yo sobre calle y ella instantáneamente comenzó a dejar caricias en mi espalda.

Calle: eso fue increíble, gracias por dejarme hacerte mía mía de nuevo, gracias porque decidiste volver a confiar en mi... TE AMO.

Juntas, Pase lo que pase. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora