Bralen (+18)

Capitulo#42

Adios

Arlen

Las náuseas producidas por los nervios comienzan a atacarme, no puedo y no quiero entrar a esa casa, si Rosalía o David se les ocurre decir algo estoy más que perdida, Liam no puede enterarse que ya estuve en esta casa.

-¿Por qué no quieres ir?- insiste en que vaya con él.

-No se me hace prudente, y además si solo vas a entregarle unas cosas no vas a tardar, ve te espero aquí - vuelvo a colocarme el cinturón de seguridad.

-Amor porfa, vamos los Evans son personas muy importantes para mí, me encantaría que los conocieras, y presumirles la novia perfecta que tengo- pobre de mi novio.

-Esta bien- lo que tenga que tronar que truene de una vez.

Salgo del auto con su ayuda, subimos las gradas y Liam llama a la puerta, ruego por qué nadie salga a abrir, y es estúpido pensar que eso pasaría ya que todo el día las cosas me han salido malísima. Abren la puerta, no es la misma señora del otro día, para nada ella es joven y muy bonita, no tiene nada que ver con la otra señora de la otra vez. La señorita nos deja pasar, el camino hacia la sala me lo sé de memoria pero hago cómo que admiro la casa como si fuese la primera vez que la veo.

Cuando llegamos a la sala nos encontramos con cada uno de los integrantes de la familia Evans, Max es el primero en juzgarme con la mirada, Isak nisiquiera me pone importancia, David Evans ve fijamente mi mano entrelazada con la de Liam, lo mismo hace Rosalía.

-Hola, ¿Cómo han estado?- saluda Liam muy feliz.

-Muy bien mi niño, ¿Y tú?- le pregunta Rosalía

-Un poco mal por eso de los problemas que atraviesa mi padre, pero de allí todo bastante bien- me toma de la cintura y me pega más a su cuerpo.ñ- quiero presentarles a Arlen, ella es ..

-La novia de Liam- escucho la voz de Brad a mi espalda, hace que cada bello de mi piel se erice.

-Es un placer conocerte Arlen- el señor David se hacerca a mi y aprieta mi mano- tú novia es muy hermosa Liam, cuidala mucho- se acerca a Liam y le palmea el cuello.

-Es un gusto conocerte linda- Rosalía me toma de los brazos y besa mi mejilla- eres muy bonita niña- la verdad no entiendo en lo más mínimo el porque se están comportando así, cómo si no nos conociéramos.

-Gracias, por la bienvenida- digo con la mirada hacia el suelo, no puedo ver a ninguno de los dos a la cara, estoy muriendo de la pena y de la vergüenza.

-Sabes Liam- Max se levanta del sofá - cuidala porque hay muchos amantes de lo ajeno y de lo que tiene suelo- ve por encima de mi cabeza, estoy segura que está viendo a su hermano- y más si lo que tiene dueño no se da a respetar, te la pueden quitar- nunca pensé decir que Max es igual de imbécil que sus otros hermanos, pero en este momento se está comportando como el peor.

-No te preocupes Max, yo sé que Arlen me ama y no te imaginas cuánto la amo a ella- besa mi frente, los ojos se me cristalizan.

-¿Podría pasar a su baño?- ya no aguanto estar aquí.

-En el segundo nivel, del fondo a la derecha- me indica el señor Evans.

Pido permiso para pasar, subo las escaleras y me adentro al baño, me siento tan mal, me siento de lo peor, siento que soy la peor porquería del mundo. ¿Por qué tuve que ponerme en evidencia? Soy una zorra, que pensaran que hace unos días estaba de lo más feliz tomada del brazo de su hijo y tan solo unos días después me ven del brazo del chico que ellos consideran como un hijo más. Me tardo bastante en el baño, pero llegó la hora de salir y seguir fingiendo. Salgo del baño y me encamino a bajar las escaleras hasta que siento una mano en tapando mi boca y la otra tomándome de la cintura, me pega a su cuerpo y me lleva a una habitación, no me alarmó porque reconozco el aroma de su colonia, además quién más en esta casa quisiera secuestrarme si no fuese él.

-¿Qué te pasa? Aquí está Liam- le reclamo en voz baja.

-Que poco te dura la dignidad a ti verdad- niega con la cabeza.

-Oyeme idiota, a mi no me hablas así.

-la verdad duele ¿No?- sonríe de lado- hace unos cuantos días te la diste de digan golpenadolo frente a todos en casa de Elisa, y ahora vieras lo mojigata que te ves de su mano- se burla - y tan falsa porque tú no lo amas, y el muy iluso jura que si.

- yo quiero a Liam, así que él no tiene nada de iluso, porque si lo quiero por algo es mi novio- no me cabe duda que quiero a Liam pero desde hace un tiempo se volvió cariño de amigo, y aunque me cueste aceptarlo también se convirtió en un poco de lástima.

-Te das cuenta tu quieres a Liam - se acerca a mí y toma mi barbilla- pero me amas a mí.

-Claro que no, yo no te amo Brad- no miento del todo.

-Entonces porque has estado conmigo, porque siempre caes rendida a mis pies cuando me acerco, siempre dices me voy a alejar de ti, pero jamás puedes basta con sentir mi tacto para que se te olvide el supuesto cariño que tienes por él - me molesta de sobremanera que hable tan seguro, y me molesta aún más que todo lo que ha dicho es la verdad.

-No seas tan egocéntrico - me alejo de él - es cierto me gustas, físicamente me atraes demasiado, pero eso no quiere decir que te ame, y claro que puedo resistirme a tí, Brad está vez es de verdad volví con Liam y así me voy a quedar entre tu y yo no volverá a pasar nada.

-No tú misma crees en lo que estás diciendo- puede que tenga razón, pero en este momento tengo que creerme la para hablar con seguridad.

-Te estoy hablando enserio, esto no vuelve a pasar- Brad se acerca dejando su boca casi pegada a la mía.

-Dime que no estás muriendo por besarme ahora mismo, dime qué no te mueres de ganas de sentir mis manos por tu cuerpo- trago saliva, la cercanía de su cuerpo me pone realmente mal.

-No, lo empujó, ya no.

Salgo de la habitación y bajo corriendo las escaleras para mí suerte Liam ya está junto a la puerta de salida, me despido rápido de los Señores y salgo de la casa.

La decisión ya la tomé, Brad en el futuro será malo para mí, y yo no quiero sufrir. Tampoco quiero ser mala con Liam. Este fue el adiós.