Mini Relatos

Minirelato N°49 : La resistencia 2

Adrien alcanzó a Marinette fuera del colegio, la chica estaba protestando mientras esperaba que el semáforo se habilitara para cruzar la calle.

—Marinette —la llamó, ella se sobresaltó y volteó a verlo—, Hey, ¿Estás bien? —dijo cuando logró llegar junto a ella.

—Sí —afirmó, pero él la miró fijamente—, bueno, no, estoy tan enojada.

—¿Por lo de Lila?

—Adrien, Alya es la creadora del Ladyblog, ¿verdad? —el chico afirmó, cuando la luz verde cambió, ambos cruzaron la puerta hacia la panadería, ingresando a ella— Adrien subirá un momento conmigo a la sala, ¿no hay problema?

Adrien sintió que sus mejillas se sonrojaban cuando vio la mirada en los padres de la chica, que, tras pasarle un par de macarrones, le permitieron el paso.

—Entonces —Marinette retomó el habla, mientras subían la escalera—. Ella sabe perfectamente que Volpina fue un akuma, no un superhéroe. ¡Y aun así me reclama!

—¿Y por qué te reclamaría a ti? —preguntó Adrien confundido, y un poco sorprendido.

—Eh, ah —Marinette se quedó sin palabras mientras abría la puerta, casi comete un error—. Es porque yo no creo en Lila, de que, si fue elegida por Ladybug, obviamente era de confianza.

Adrien dejo caer sus hombros un poco, casi pensando que quizás.... Sacudió su cabeza, no, él ya no trataría de averiguar aquello, menos ahora. Al contrario, tomó su teléfono y abrió el Ladyblog, buscando el apartado de Volpina.

—¿Y sí le mandamos una captura de su blog a Alya? —comentó, mostrándole la pantalla de su teléfono—. Para que recuerde.

—No —negó con la cabeza, indicándole el asiento junto a ella—, no quiero hacer nada, estoy muy molesta ahora.

Adrien se sentó a su lado y ella se acomodó contra él, el rubio sonrió cuando la rodeó con su brazo.

—¿Y ahora estás mejor?

—Un poco —respondió. Adrien le dio un beso sobre el pelo, antes de apoyar su cabeza contra la de ella—, Lila me pone tan de malas, sé que es tu amiga, pero...

—Oye, tranquila —le corrigió—. Lila no es mi amiga, solo somos compañeros de trabajo y estoy obligado a tratar bien con ella porque trabaja con mi papá. Solo tú importas en este segundo. Y si quieres descargar toda tu rabia en este segundo, yo te escucho —Marinette se separó de él y lo miró— ¿Qué?

—¿Y si mejor te gano jugando en el Mecha? —la sonrisa en sus labios, hizo que Adrien negara con la cabeza, antes de soltarla para que vaya por los controles.

—Tengo miedo de cuanto voy a durar en tu estado de irritabilidad.

Marinette solo sonrió entregándole un control.

—Pues veamos que tal te va, Adrien Agreste.

...

En el sótano del colegio, Alya observaba su blog en su Alliance, luego, miró a Lila hablar con Rose y Juleka, sintiéndose completamente tonta.

Un recuerdo golpeó su cabeza, recordando cuando habló con Ladybug sobre la akumatización de Lila...

Cerró los ojos y aspiró profundamente.

Quizás era hora de hacerle caso a Marinette de una vez por todas, y mantener vigilada a Lila. Y con ese pensamiento, se acercó al grupo de chicas a unirse a la conversación.