Pequeño Desastre

Capítulo 29

—Hola, guapo—Taehyung entró al auto y se acercó a dejar un beso en los labios del peli negro.

—Ni creas que con un beso olvidare lo que me hiciste, Kim Taehyung.

—¿Con muchos?—sonrió inocente.

Ya había terminado su hornada de clases, y Jungkook lo había esperado como prometió. Ahora iba conduciendo hacia el lugar del que le habló al rubio.

Estaba muy emocionado, y nervioso a la vez. Le tenía una pequeña sorpresa, aunque nada material, o bueno si, un poco, tal vez para el futuro.

—¿Tienes hambre?—preguntó.

—Si—hizo un puchero—¿Podemos pasar a McDonald's?—Jungkook asintió, eso podía atrasar un poco su nerviosismo.

Veía por la ventana los enormes rascacielos de la ciudad de Seúl. Él era de Daegu, pero esta ciudad lo había visto crecer, y aunque amara su lugar natal, la capital era su hogar.

La canción The Scientist había comenzado a reproducirse. Taehyung la reconoció de inmediato, era la canción favorita de su yo de 12 años. En ese entonces no sabía nada de inglés, y solo pudo traducir el título, El científico. Y se identificó con ella por esa única palabra, pero ahora de mayor se daba cuenta del significado, y simplemente agradeció no ser como aquel científico, que se dejó ganar por el oficio y no por el amor.

Y aunque haya estado enamorado antes, no se comparaba con lo que sentía ahora, a pesar de no poder afirmar amar a su ex profesor. Quizá es que nunca estuvo enamorado de su amigo, y solo quería forzar a sentir lo que los demás decían sentir por sus compañeras, y Jimin era el vínculo más cercano que tenía. Y es que ambos sentimientos no se comparaban. Con Jimin era fraternal, seguridad, pero con Jungkook podía sentirse espontáneo, protegido y un sentimiento más que no podía describir cada que lo besaba.

Agradecía que Jungkook llegara a su vida y le hiciera notar eso.

—Gracias, Jungkook.

—¿Por el McDonal's?—el rubio le sonrió con cariño.

—Solo por existir.