Luna Engreída ✓

⚸ | Capítulo 22

Me quedo unos segundos analizando toda la información que he recopilado, estoy entrando al despacho de papá con el diario de la princesa en mis manos, necesito respuestas porque me he quedado con un millón de dudas y esa era la última página del libro, han pasado unos días desde que lo leí y volví a leerlo completo para tener mis ideas claras, él está hablando por teléfono, no se sorprende cuando entro y me siento, mi mente trabaja muy rápido creando teorías.

—Hola solecito, ¿Cómo estás?

—Bien papá, ¿Cómo estás tú?

—Todo bien, como mucho trabajo, pero feliz de verte.

—Tengo unas preguntas que hacerte —pongo el diario encima de la mesa, él lo mira y luego sonríe.

—Espere tanto por este momento.

—¿Tú lo pusiste en mi habitación? —asiente lentamente —. ¿Desde cuándo?

—Cuando me llamaste avisándome que ibas a volver.

—Entonces sabías lo que iba a pasar en el bosque con Sébas.

—Oh solecito, me encantaría tener la clarividencia, pero sabes muy bien que ese no es mi fuerte, ese diario pasa de generaciones en generaciones, para que todos conozcamos la historia verdadera de cómo se creó la barrera, también sé de buena fuente que los lobos tienen su propio diario que les explica, aunque no sé qué información contiene.

—¿Me diste el diario para que entienda porque se creó la barrera?

—Y también para que la rompas.

—¿Yo? ¿Cómo?

—No lo sé, eso tendrás que descubrirlo tú, Liam King se enamoró profundamente de su mejor amiga Hailee Collins, he hizo todo para que ella se enamorara de él y cuando eso sucedió ellos rompieron el hechizo, en ese momento él se dio cuenta de que Hailee era su alma gemela, para su buena suerte, ellos están destinados a estar juntos, hicieron exactamente lo que la princesa dijo que debía de hacerse para romper el hechizo y por eso los demás alfas encontraron a su alma gemela.

—Menos Bastian.

—Exacto, menos Bastian.

—¿Sabes algo de eso papá?

—No tengo ninguna información referente a la nula existencia de su alma destinada, quizás eres tú y él no se ha dado cuenta.

—Que chistosito andas hoy papá, volvamos a lo de la barrera, según lo que dice el diario, que para romperla hay que hacer un acto de amor verdadero, eso me dejó pensando, ¿Qué sería un acto de amor verdadero para ella?

—Eres más inteligente que yo solecito, no he logrado descubrir eso, supongo que tiene que suceder de manera espontánea, no planeado con antelación.

—Sí, también pensé en eso.

Aunque no dejo de darle vueltas a la información, miro la hora en mi reloj y tengo que irme a recoger a Lena al aeropuerto de la ciudad, la suerte que está a una hora del pueblo, antes de salir de la casa subo a mi habitación y guardo el diario en uno de mis cajones, cuándo tenga la mente despejada hablaré con Bastian sobre esto, papá me dice que no le de muchas vueltas al asunto y me pide que traiga a Sébas en la próxima visita, le gusta pasar el rato jugando con él, papá ama demasiado a los niños, será un abuelo amoroso.