⚸ | Capítulo 26

77.6K 7.3K 834
                                    

Pov

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Pov. Bastian

Estoy preocupado.

Muy preocupado, miro el rostro pálido de Adhara, ella me devuelve la mirada poniendo sus ojos en blanco, pero al segundo se da la vuelta y vuelve a entrar al baño, camino detrás de ella agarrando su cabello, se ha pasado la mañana vomitando, no sé qué le cayó tan mal, aunque quería irse para la tienda así, pero no la dejé podría pasarle algo allá sola, desmayarse o algo peor, como desnucarse con la taza del excusado mientras vomita.

Alejo ese pensamiento de mí.

—Creo que deberíamos de ir al hospital.

—Estoy bien.

—No lo estás, solo mírate, estas demasiado pálida y sin fuerza, ¿Qué comiste?

—Creo que las donas que compré estaban vencidas o algo así.

—Demandaré a la dueña de la cafetería.

—No exageres.

La ayudo a levantarse del suelo, camina hasta el lavamanos y se enjuaga la boca, respira hondo, se mueve arrastrando los pies hasta la cama, me quedo en el respaldo de la puerta mirando lo que hace, se acomoda poniendo una almohada en su estómago para abrazarla, pero se menea buscando la posición correcta, suelto un lloriqueo cuando se frustra, la lanza al suelo y se queda boca arriba mirando el techo.

—¿Te sientes incomoda? ¿Te puedo ayudar en algo?

La habitación se queda en silencio durante unos minutos, pero luego fija su mirada en mí.

—¿Sabes? —la observo fijamente, sus mejillas se tornan rojizo, pero leve —, no me quejaría si me añoñas.

Me gusta ver como ella va fluyendo poco a poco, aunque a veces tengo que ayudarla hacerlo, pero cada vez se va soltando más, me acerco a la cama quitándome los zapatos en el proceso, me acomodo antes de atraerla a mi cuerpo, apoya su cabeza en mi pecho, acaricio su espalda lentamente, tenerla entre mis brazos me hace sentir pleno, ver como cada día confía más en mí, en lo nuestro, es una sensación gratificante.

En silencio abunda en la habitación, espero que se duerma para que descanse un poco, mamá le hizo un caldo de sopa con pollo para intentar aliviar su estómago, pero parece que no funcionó, son las doce del mediodía, mande a Brandon a buscar a Sébastien a la guardería, no tardan en llegar, aunque sé que él querrá venir a verla, le dije a mamá que lo entretenga hasta que Adhara se sienta bien.

—Cuando me sentía mal, papá era el único que acudía a mi rescate —me sorprendo cuando escucho el tono de su voz, pensé que estaba dormida —, él es mi héroe, me enseño todo lo que sé, es la persona más maravillosa sobre la faz de esta tierra, su lenguaje del amor es dar mimos. ¿Cuál es el tuyo?

—No lo sé, creo que dar mimos también, ¿Tú tienes?

—Antes pensaba que no, pero con el pasar del tiempo me di cuenta que mi lenguaje del amor es dar mi tiempo, no suelo ser muy cariñosa, solo con papá y Sébas, porque con ellos no tengo miedo de lo que representa tenerle cariño a alguien, sé que nunca me abandonarían o se alejarían de mí por estar con alguien más, no sé si me entiendes.

Luna Engreída ✓Where stories live. Discover now